pamplona. La galería San Antón expone hasta el 5 de julio un conjunto de obras de Mireya Martín Larumbe. La pintora pamplonesa, que ganó el año pasado el Premio Pamplona Jóvenes Artistas, se enfrenta a su primera exposición en solitario con una muestra de sus más recientes trabajos en el campo de la pintura, un conjunto de cuadros en los que predomina la abstracción, aunque siempre hay una parte figurativa basada en el cuerpo humano. "Trabajo mucho con referencias anatómicas, líneas curvas, formas orgánicas del cuerpo, que me sirven un poco de excusa para generar estos paisajes orgánicos que es más o menos lo que yo hago" explica Mireya.
Sus obras son un juego de formas y colores, que muestran el recorrido de la artista en la investigación plástica, que comienza con obras en tonos muy fuertes y finaliza con un tratamiento del color mucho más pastel, más aguado.
"Los cuadros que hay al entrar en la exposición tienen una carga cromática mucho mayor porque son de una serie anterior, después están los cuadros más suaves, ahora estoy en un momento más pastel", indica la artista.
Mireya es una pintora a la que le "apasiona la investigación" y sus obras plasman esta curiosidad; de hecho, en la exposición se pueden observar cuadros realizados en distintos soportes y materiales, acrílico, pastel, lápiz, carboncillo e incluso tinta.
"Lo que intento buscar es un juego de formas, no es nada conceptual", comenta Mireya, "lo que más me interesa es jugar con las texturas, el color y las formas, la investigación continua", concluye.
"Más que trabajar con conceptos cerrados, trabajo con sensaciones, me gusta trabajar con las densidades de la pintura, me gusta ver como la línea se va descomponiendo, se va hibridando. Lo que intento despertar son sensaciones en el espectador, por eso me gustaría que la gente que viniera a ver la exposición lo hiciera con una mirada expectante, con curiosidad" añadió.
Sus cuadros son un claro ejemplo de sensibilidad y de introspección, de un gusto por el movimiento que ha acompañado a la artista desde el territorio de la pintura a la animación, no en vano, Mireya Martín fue la primera persona en ganar el premio Pamplona Jóvenes Artistas con una propuesta audiovisual.
"Lo que más me seduce de la animación es que trabajas con otras dimensiones, el tiempo y el espacio, no es estático como la pintura y eso me permite jugar mucho con las líneas, las formas, me gusta mucho", señala Mireya.
La artista, que se licenció en Bellas Artes en la UPV, se mostraba encantada con la oportunidad que le había brindado la galería. "El hecho de que una galería que nunca ha programado arte contemporáneo me haya elegido es un gran honor" indica la pintora.
La exposición de Mireya Martín se podrá visitar en la galería San Antón hasta el 5 de julio.
