PLATOS llenos de hambre, De los derechos, ni el humo y LA pobrezA son las tres piezas audiovisuales con las que la productora navarra Iki Movies ha logrado el premio a la mejor trilogía del IV certamen estatal de clipmetrajes (cortos de un minuto de duración) organizado por Manos Unidas.
Iker Lanz, Xabier Luna e Iñaki Díaz de Rada, los tres pilares que sostienen esta productora, recibirán hoy el premio durante el desarrollo de una gala que tendrá lugar en Madrid y en la que se conocerá si también se han hecho merecedores del galardón al mejor clipmetraje, categoría en la que se han presentado más de 120 piezas. Con el gusanillo de saberse ganadores, los tres recordaban ayer como ha sido su recorrido por este certamen. "El año pasado ganamos el premio Cortico navarro del Festival de Cine de Pamplona, festival en el que, además, nos dieron la información para participar en el Certamen de Clipmetrajes de Manos Unidas. Decidimos presentarnos -explica Xabi- y nos quedamos al borde de ganar, de hecho, se hizo referencia a nuestro trabajo en un reportaje de La Sexta sobre el concurso. Este año casi habíamos decidido no presentarnos, pero cuando recibimos el folleto informativo, vimos que aparecíamos en el mismo. Entendimos este gesto como un guiño y decidimos volver a participar".
El tema sobre el que tenían que trabajar este año era Diciendo NO a la pobreza, dividido en tres subapartados denominados: Hambre, Derechos Humanos y Feminización de la pobreza. Para cada uno de ellos presentaron un clipmetraje resultando ganadores, de momento, a la mejor trilogía. Xabi Lanz, guionista e ideólogo del trío, resume las tres ideas sobre las que se han cimentado los clips. "Para Hambre quisimos reflejar que hay mucha gente que no tiene nada para comer y se tiene que imaginar la comida. Esto lo plasmamos con varias personas del primer mundo comiendo sobre platos vacíos junto a una persona pobre que intenta comer y cuya sentencia es: 'Hay mucha gente que no se tiene que imaginar la comida, pero 4.000 millones de personas, sí'. En el apartado de Derechos Humanos quisimos reflejar la idea de que aparentemente son los mismos para todos pero la realidad dice lo contrario. Para ello utilizamos simbólicamente un libro que recoge estos derechos en manos de unas personas pobres que, para lo único que lo pueden utilizar es para calentarse, así que lo queman. Pero aparece una persona del primer mundo y les quita el libro, negándoles hasta el calor de esos derechos humanos. En cuanto a la Feminización de la pobreza, lo importante era reflejar que el 70% de las personas pobres que hay en el mundo son mujeres. Para ello pasamos muchas muñecas por la cinta de una cajero de supermercado mientras en una pantalla ficticia, y por megafonía, se hacía referencia a los datos de la pobreza femenina".
En cuanto a la elaboración técnica de los clips, Iker apuntó que "en el primero, como tenemos medios limitados, tuvimos que grabar planos fijos de los seis que estaban comiendo y luego en posproducción montarlo como si el restaurante estuviera lleno. Para el segundo, tuvimos que crear el fuego como un efecto y para el tercero, grabado en el Eroski de Mutilva, utilizamos fondos para recrear las pantallas con los datos, con una iluminación muy oscura y cortante".
Los tres restan valor al premio material obtenido y apuntan "que lo que más nos motiva es el mensaje que dejas, provocando que las personas reflexionen sobre algo que antes no se habían parado a pensar. Por otra parte, para hacer los clips tienes que documentarte, un trabajo que nos enseñó mucho sobre aspectos como la feminización de la pobreza". Al margen de estos tres trabajos, Iki Movies, junto con otra productora de Estella, Simetría, están trabajando ya en un largo sobre la discapacidad.