Camilla Cabello arrasa en los MTV

Así, Cabello se coronó en el espacio bilbaíno como una de las reinas de la música actual. “Hace no mucho yo apenas tenía 15 años, e idolatraba a mis referentes en la música. Por eso este premio se lo dedico a mis fans, que nunca dejan de apoyarme. Os amo”, afirmó la cantante al recoger el trofeo a Mejor Artista que le entregaron los actores Diego Luna y Michael Peña. “Como dirían los españoles ¡Estoy flipando, tío!” “Gracias a mis fans por estar ahí siempre”, continuó.

La ceremonia fue un compendio de impactantes puestas en escena que dejó boquiabiertos a los miles de fans que siguieron el espectáculo a pie de pista y desde las gradas del Bizkaia Arena, donde se vivió un auténtico show con fuegos artificiales, trucos visuales, bañeras como la de la actuación de Bebe Rexha, urnas, antorchas y hasta un guiño al cuadro autodestructible de Bansky.

Además, el espectáculo pensado para televisión, con sus pausas publicitarias y una audiencia potencial de 450 millones de hogares en más de 170 países, contó con un montaje vistoso y colorista pensado para los 14 artistas que actuaron en el escenario, como Jason Derulo, David Guetta, Janet Jackson, el dj Marshmello, Halsey, Rosalía o Nicki Minaj, quien fue la segunda más premiada, con dos galardones, el de Mejor artista de hip-hop y el de Mejor look. “Os quiero a todos... ¿A quién más le doy las gracias? Ah sí, a mi madre”, afirmó al recoger el primer premio.

una gala en femenino Fue también la encargada de inaugurar la gala, con Good form. Lo hizo descolgándose de una jaula prendida del techo, rodeada de bailarines con túnicas negras en una escenografía casi de ritual secreto. Con los primeros efectos pirotécnicos del espectáculo, se le unieron después las británicas Little Mix, con quienes interpretó Woman like me, dejando claro que la noche iba a estar escrita en femenino.

No podía faltar la pequeña historia que precede la llegada de la presentadora al show. Si el año pasado Rita Oraa lo hacía en albornoz -en un vídeo que contó con el cameo del alcalde de Londres, Sadiq Khan-, en esta ocasión a Hailee Steinfeld se le encargó la misión de robar el trofeo de los premios EMA en un museo. Tras su llegada, no faltó un “kaixo” para demostrar que estaba encantada de presentar estos galardones, función que compatibilizó con su propia actuación, todo un guiño a la película que estrenará a finales de diciembre, Bumbleblee, el primer spin-off de Transformers. Y es que, si Panic! At the Disco habían llegado al escenario descolgándose supuestamente desde la torre del BEC, la estrella llegó al escenario en el interior de un vehículo que formaban una veintena de bailarines.

Con más de media docena de cambios de vestuario y algún problema con el sonido del micrófono, Steinfeld se autopresentó a ella misma jugando con el mando a distancia de la plataforma central, elevándola, ordenando aplaudir al público e incluso lanzando más fuegos de artificio. Por su parte, la barcelonesa Rosalía, que acaba de publicar su disco El mal querer, una de las revelaciones del año en todo el mundo y que ayer se fue a casa reconocida por los fans de MTV como mejor artista estatal, puso al auditorio en pie con su Malamente, una de las actuaciones más comentadas de la noche.

destacada Janet Jackson Muse se conformó con mostrar imágenes de su Pressure en el concierto del sábado en San Mamés antes de que llegara una de las actuaciones más esperadas de la noche: una Janet Jackson que llegó descalza, entre pantallas envueltas en niebla, antorchas y tambores africanos. Emocionada, recogió poco después el premio Icono Global a sus 40 años de carrera en los que ha publicado 11 discos de los que ha vendido 160 millones de copias, con un encendido homenaje a todas las mujeres que sufren violencia machista. “Quiero hablar por aquellas que han sido acalladas, yo he sido una de ellas: mujeres maltratadas, amenazadas... Se acerca un mundo en el que su voz sea escuchada. Sois mis hermanas. Mujeres, nuestras voces van a ser oídas”, aseguró.

Y si Bebe Rexha deleitó a los asistentes con una fascinante intepretación de su I’m a mess, que comenzó sumergida en una bañera y terminó en una hipnótica coreografía junto a un centenar de bailarines -fue de las pocas que se acercó a los fans que seguían el show a pie de pista al terminar la actuación para chocar sus manos-, con Halsey comenzó la lluvia en el pabellón con su intimista versión de Without Me, encadenada en el interior de una gigantesca urna de cristal.

Entre los números más coloridos quedaron el Trust Me Lonely, de Alessia Cara -quien se erigió como la Mejor artista World Stage-, rodeada de pantallas en las que se proyectaban bosques, desiertos y campos en flor, aunque Jack & Jack supieron ganarse al público en una emocionante actuación donde uno estuvo al piano y otro al micrófono. Cuando regresaron a la tierra, se vieron rodeados por una legión de fans.

Antes de que Hailee Steinfeld despidiera esta edición de los EMA hasta el próximo año, Marshmello -que se hizo con el premio a Mejor artista de electrónica- puso el fin de fiesta a la noche. Lo hizo primero con Anne-Marie, con su sencillo multiventas Friends, y después con Bastille, llenando el pabellón con balones hinchables con la icónica máscara del nuevo hombres sin rostro y una lluvia de confeti amarillo.

Mejor artista. Camila Cabello.

Mejor vídeo. Camila Cabello, ‘Havana’ ft. Young Thug.

Mejor canción. Camila Cabello, ‘Havana’ ft. Young Thug.

Mejor actuación en vivo. Shawn Mendes.

Mejor artista pop. Dua Lipa.

Mejor artista revelación. Cardi B.

Mejor artista local España. Viva Suecia.

Mejor artista rock. 5 Seconds of Summer.

Mejor artista alternativo. Panic! At the Disco.

Mejor artista electrónico. Marshmello.

Mejor artista local Estados Unidos. Camila Cabello.

Mejor push. Grace VanderWaal (Diciembre 2017).

Mejor artista hip-hop. Nicki Minaj.

Mejor look. Nicki Minaj.

Mejores fans. BTS.

Mejor artista World Stage. Alessia Cara, MTV Spotlight @ Hyperplay, Singapur 2018.