pamplona - La idea es sencilla: tres de los cómicos más famosos se reúnen sobre un escenario para analizar, desde su peculiar punto de vista, qué es eso del sentido del humor. Ellos son Flo, Mota y Segura, también conocidos en ciertos sectores del público como Krispin Klander, La vieja del visillo y Torrente.

Confiese, ¿quiénes son los dos tontos y quién es yo y por qué?

-Cuando me preguntan como se titula el show y digo Dos tontos y yo, está claro que yo soy yo. O sea, Dos tontos y yo. Es decir yo... Por lo que los dos tontos ya se sabe quiénes son, por exclusión. Y sí, son muuuuuuu tontos. ¡¡¡Confirmado!!!

¿De dónde surgió la idea de compartir escenario en directo y cuánto tiempo les ha costado cuadrar agendas para hacer la gira?

-Ha sido complicado tanto sentarnos para decidir hacerlo como para escribirlo y ponerlo en marcha. Sabíamos que iba a ser difícil, pero la respuesta del público sí que nos ha dejado con la boca abierta. Ya están a la venta todas las ciudades. Muchas de ellas con todo vendido, por lo que se han abierto más funciones. Estamos muy, muy contentos con la expectativa creada y a cada ciudad a la que vamos el público se lo pasa en grande. Solo por eso ya ha merecido la pena tantas dificultades de agenda. Solo podemos decir ¡¡¡gracias!!!

¿Cómo fue el proceso de creación del espectáculo, qué es lo que más costó y con qué recuerdo en particular se queda?

-Ha sido complicado y lo sigue siendo, aunque cada vez menos, ya que en cada ciudad a la que vamos escuchamos mucho al público, que responde de manera diferente, por lo que vamos retocando el espectáculo sobre la base que hemos creado hasta terminar de redondear El sentido del humor. El recuerdo que me va quedando es que es algo mítico juntarnos los tres y que hoy por hoy no hay ninguna oferta de comedia así en los escenarios españoles.

¿Hay alguno de los tres que lleve la voz cantante en el espectáculo o han optado por purgar al que intentaba salirse un poco del tiesto? ¿Cómo han encontrado el equilibrio en las apariciones?

-Nuestra finalidad es hacer reír. Por encima de todo. Nos llevamos muy bien dentro y fuera del escenario y aunque no ha sido fácil engranarnos los tres para ser uno, hemos conseguido que entre nosotros haya una única comunicación con el público, para que ría y olvide sus problemas diarios por un buen rato.

¿De qué nos habla el espectáculo, qué temas surgen en escena, están todos preparados o van adaptándolos en función de lo que pasa semana a semana en el país?

-Cada show es distinto al anterior. La base es el sentido del humor. ¿Qué nos hace gracia? ¿ Por qué nos reímos de cosas diferentes cada uno? ¿La risa alarga la vida? ¿Qué es el humor negro? Dudas que surgen y que intentamos resolver con nuestro sentido del humor.

Después de tantos años de carrera, ¿tienen activo aun el mecanismo de aprender de los colegas de oficio, la curiosidad es un factor clave en vuestro trabajo?

-Siempre. Si no fuera así, no funcionaría la comunicación con el público. No hay egos. Bueno, solo los sostenibles, que eso también es bueno. Aquí los tres somos uno. Y entre nosotros nos ayudamos, sugerimos, opinamos sobre lo que está bien y lo que quedaría mejor.

¿Hay algún tema sobre el que nunca haría humor?

-Más que un tema es un contexto. Es muy importante el contexto. Mientras no se hieran sensibilidades, hay que reírse de todo. La risa es una gran terapia para la vida.

¿Cómo está reaccionando el público al espectáculo? ¿Se nota mucho que hacen falta risas en este país?

-La reacción es alucinante. Ya sea en el sur o en el norte, este u oeste la gente tiene un gran sentido del humor. Eso es lo que mola. Nos queremos reír. Eso es muy sano.

¿Y qué les da el público a Flo, Mota y Segura?

-Es una sensación difícil de explicar, pero tener la posibilidad de hacer reír a la gente es un lujo que esta vida concede y que nosotros aprovechamos muy agradecidos siempre a todos nuestros seguidores.

¿Van políticos o responsables institucionales a verles; tienen sentido del humor?

-Si ha venido alguno, no nos hemos enterado. Aun así tenemos, toda la gente, más sentido del humor que nuestros políticos porque nos echamos muchas risas a su costa aunque no nos hagan gracia.

¿Están preocupados por lo que ha sucedido, y sigue sucediendo, en este país con algunos cómicos que han sido llevados a los tribunales? ¿Qué pueden decir al respecto?

-Preocupados, no. El sentido del humor siempre está ahí. Hay personas que lo desarrollan más que otras, pero es una emoción mágica que nos permite digerir esta vida que, a veces, nos da muchos disgustos. Y eso siempre será un lujo que no hay que desperdiciar.

¿Cuánto tiempo va a durar la gira?

-El humor es un alimento para el alma que nos permite disfrutarnos y disfrutar del público. Eso es maravilloso. ¡Y mientras eso sea así habrá Dos tontos y yo para rato!

¿Un deseo para 2019?

-Que no suban mucho más el precio de los carburantes.