pamplona - La casa de cultura de Berriozar acogerá mañana, a las 19.00 horas, el estreno de La máquina y yo, espectáculo de circo teatro gestual en el que la escenografía es parte viva y activa de todo cuanto sucede en la escena.

Creada y protagonizada por David Almazán, esta propuesta cuenta la historia de un investigador -Pepu- que realiza toda clase de pesquisas en torno a una máquina -HaundiMachine- que está a punto de entrar en funcionamiento. Una máquina que tiene la capacidad de agrandar los objetos y posee mucho más poder del que quizá sería conveniente. En ese sentido, la obra es una reflexión sobre la presencia tan destacada que estamos concediendo a la tecnología en nuestras vidas. La máquina y yo surge de una exploración que Almazán, especialista en malabares, ha realizado en los últimos cuatro años “a partir de los objetos con los que trabajo habitualmente”, en su caso las raquetas, y de la técnica de la multitarea. En escena comparte protagonismo con esta máquina, “que es un elemento innovador y atractivo” que da mucho juego y vida al montaje, que contiene muchas historias dentro de una más general. “Vivimos rodeados de máquinas, yo ahora mismo estoy en mi cocina y tengo al lado el horno, el microondas, la nevera, la campana; estoy con el móvil...”, señala el artista, que cita una frase que ha leído recientemente y que resume la idea: “Cuando el teléfono estaba atado a un cable, los humanos eran libres”. Precisamente, el teléfono tiene un papel crucial en el espectáculo y cada vez que suena cambia el ánimo del personaje. “La función dura 45 minutos y, aunque no tiene texto, el movimiento es constante para que el espectador no pierda atención en ningún momento”, apunta Almazán, que subraya su “apuesta personal” por un teatro como el gestual que puede representarse en cualquier lugar del mundo.

La máquina y yo es “un paso más” en la trayectoria de Circo Dabitxi, ya que el malabarista no solo ha ido perfeccionado y completando sus habilidades e incorporando registros del teatro, sino que, además, ha creado esta propuesta para salas. “Yo habitualmente actuaba al aire libre, pero este es un espectáculo más cuidado, con muchos detalles”, y, aunque también ha hecho una versión para calle, le gustaría poder llevar a su personaje y su extravagante compañera a espacios escénicos.