Veinticinco años después de su creación, Pasadas las 4 estrena su nueva propuesta escénica, Route 6.6. Es el nuevo viaje de las queridas Luisa y Marisa, personajes que han crecido, están en un punto que podría enmarcarse en la adolescencia y respiran en todo su ser ansias de libertad.

Para la creación de este espectáculo, la compañía ha regresado a la Casa de Cultura de Zizur Mayor -espacio donde estrenaron sus primeros espectáculos Te lo juro por mi madre que me las voy a cobrar y Baby boom en el paraíso-, donde ha realizado ensayos y el estreno -ayer mismo- de las sesiones escolares de Route 6.6., una propuesta musicoteatral dirigida a público infantil y subvencionada por el Gobierno de Navarra.

Luisa y Marisa reciben en herencia una guitarra eléctrica muy especial con la que su tío Liberto, un guitarrista libre y despierto, ha recorrido el mundo de Norte a Sur y de Este a Oeste. Como si de un diario se tratara, cada cuerda contiene una experiencia maravillosa que las protagonistas podrán revivir y, de esta manera, viajar a diferentes rincones del mundo y descubrir hermosas historias: 6 cuerdas, 6 cuentos. Cada cuerda un lugar, cada lugar una historia de esas que, para siempre, se guardan en la memoria. Este es el hilo conductor del nuevo espectáculo de Pasadas las 4, en el que la compañía se embarca junto a profesionales ya habituales de sus proyectos y también con nuevos fichajes como el guitarrista Luis Giménez, Gemma Martínez y la mirada experta de Emi Ekai como asesora escénica. “Queríamos una mirada experta como la suya para dar un paso más y darles otro toque a estos personajes que han crecido un poco en todos los sentidos desde su nacimiento”, explican Belén Otxotorena e Inma Gurrea.

Luisa y Marisa, quienes “mantienen la alegría que les caracteriza pero de otra manera” -apuntan sus creadoras- interactúan en Route 6.6. con la guitarra eléctrica, los teclados, el theremin y, por supuesto, con la percusión. El 100% de la música ha sido creada para la ocasión y el autor de la mayoría de las piezas es el propio Luis Giménez, guitarrista que da vida a la protagonista del espectáculo: la guitarra del tío Liberto.

Desde que Pasadas las 4 empezó a crear espectáculos infantiles, asumió el compromiso de llevarlos a cabo también en euskera. Con Route 6.6. da un paso más ya que la versión al euskera ha sido traducida por Juan Kruz Igerabide (Premio Nacional de Literatura Infantil); además, uno de los cuentos seleccionados (también de su autoría) ha sido traducido del euskera para la versión de castellano. Se trata del El sombrero furioso, en palabras de Igerabide “una especie de recorrido iniciático, de subida y bajada, de un niño o adolescente inquieto que necesita espacio. Necesita expandirse libremente”.

“Como decía Juan Ramón Jiménez, los niños necesitan intemperie. Es lo que simboliza el cuento. Lo he hecho con mucho humor y con un toque de surrealismo”, añade el autor y Premio Nacional de Literatura Infantil, para quien los cuentos “son una de las principales herramientas de la psique, junto con la poesía y el arte”. Rimas no faltan en Route 6.6., un espectáculo creado a base de ritmos sobre ritmos, concebido como un gran mar de olas que con su vaivén embarca al público en un interesante recorrido vital.

los cuentos

Reivindicando libertad de pensamiento

Pasadas las 4 retoma la magia de los cuentos porque, como ya confirmaron en su espectáculo Cuentos de un ciempiés: unos van de canto, otros del revés, dentro del teatro, el cuento tiene una capacidad educativa y pedagógica extraordinaria. “Es primordial en el proceso de aprendizaje y en la asimilación de valores”, asegura Belén Otxotorena. La cultura del cuento es la cultura que reclama la libertad de pensamiento, algo que también reivindican Luisa y Marisa, personajes que, desde sus inicios, pretenden ser una metáfora de la alegría y de los sueños por cumplir. “Uno de nuestros objetivos con este nuevo proyecto era seguir investigando en las diferentes maneras de contar con el deseo de que el público experimente también nuevas formas de escuchar”, dicen las impulsoras de Pasadas las 4. Para ello, han escogido seis historias diversas pero conectadas entre sí: una fábula, un cuento clásico de Los Hermanos Grimm, una de las historias disparatadas de Úrsula Wölfel, la adaptación de un relato de Juan Kruz Igerabide, un poema de Gloria Fuertes convertido en blues por Edurne Arizu y un cuento escrito por Belén e Inma inspirado en la biografía de Léon Theremin, inventor del instrumento del mismo nombre que estará presente en directo. Tanto en los cuentos, adaptados para la ocasión, como en la música, subyace el deseo de libertad.

En paralelo a los estrenos familiares de este fin de semana, la compañía ha impulsado diversas actividades para “expandir el deseo de creación entre los asistentes”.

Músicos. Luis Giménez (guitarra), Edurne Arizu (theremin, voz y teclados) y Txus Egilaz (batería).

Actrices. Belén Otxotorena e Inma Gurrea (castellano); Izaskun Mujika y Patrizia Eneritz (euskera).

Asesora escénica. Emi Ekai.

Traductor al euskera. Juan Kruz Igerabide.

Mañana y el domingo. Mañana en Civivox Iturrama (euskera), y el domingo en la Casa de Cultura de Ansoáin (castellano). 18.00 horas.

Noviembre-diciembre. El 24, en Artica; el 30, en Kursaal (Donostia); y el 28 de diciembre en Villava. Todas a las 18 horas, en castellano.

Photocall. A la salida de las funciones, el público podrá fotografiarse con la guitarra de Liberto.

El buzón de la rima. A la entrada y salida del espectáculo, se podrá escribir y depositar allí cualquier pareado o poesía.

Concurso ‘La séptima cuerda’.

Se anima al público infantil a imaginar y escribir (castellano y euskera) qué historia podría esconder la guitarra eléctrica si en vez de 6 cuerdas, tuviera 7. Las propuestas se podrán entregar hasta el 20 de diciembre en El buzón de la rima y en las librerías Elkar y Chundarata.