- Ciertas personas son un poco raras o distintas a ojos de la sociedad. Pero en ocasiones ser diferente puede cambiar el punto de vista sobre muchas cosas y en una investigación criminal, incluso ser un factor decisivo para resolver un caso. A las 23.00, Cosmo estrena Bright minds, un drama policial que cuenta con un dúo muy atípico y sorprendente como protagonista.

Astrid et Raphaëlle, su título original, es una coproducción franco-belga en la que dos mujeres policías forman un gran equipo. Juntas investigan y resuelven los casos de asesinato más difíciles. Las dos son muy diferentes, pero se complementan muy bien. Astrid (Sara Mortensen) es ordenada y discreta. Y por una buena razón: tiene síndrome de Asperger, un déficit del desarrollo que se incluye dentro del espectro autista y que afecta la interacción social recíproca y la comunicación verbal. Es una persona muy organizada y metódica que necesita puntos de referencia permanentes y no tolera la improvisación ni situaciones inesperadas. Recién cumplidos 30 años y pese a su trastorno, tiene sus aficiones y su gran pasión es resolver puzles.

Raphaëlle Coste (Lola Dewaere) es una comandante de policía con un hijo y una vida bastante complicada. Es espontánea, impulsiva, desordenada y le cuesta mucho centrarse. Su rutina cambiará cuando se encuentre con Astrid, una brillante e inquietante joven que, con su maravillosa mente y todos los conocimientos de años trabajando en el archivo de la Policía en su cabeza, le ayudará a resolver los casos más complicados.

Cuando Raphaëlle accedió al departamento de archivos de la Policía para una investigación, no presentía que iba a toparse con esta joven tan particular. En cuanto se encuentran, descubre inmediatamente su potencial y considera que Astrid puede ser muy útil visitando el lugar del crimen, así que le propone salir del sótano de los archivos -donde está voluntariamente confinada- y le pide que formen equipo, poniendo sus extraordinarias habilidades al servicio de la investigación criminal. Raphaëlle ofrece a Astrid la oportunidad de expandir su mundo de forma segura, y ella acepta el reto. Al principio su relación se basa en el interés, pero pronto desarrollarán una amistad sincera y muy fuerte. De este encuentro nacerá un nuevo dúo: dos mujeres que se irán conociendo a través de las investigaciones y que poco a poco aprenderán a convivir y a apoyarse mutuamente. Sus diferencias las hacen ser muy eficientes investigando asesinatos: son una pareja infalible frente al crimen.

Bright minds es un procedimental con gran protagonismo femenino y destaca el valor de la diferencia. En ese sentido enlaza con ficciones como The Good Doctor y presenta una visión realista de las personas autistas, llena de matices y que huye de los estereotipos y la caricatura que películas como Rain Man instauraron en el imaginario colectivo.