La Consejera de Cultura del Gobierno de Navarra, Rebeca Esnaola, afirmó ayer que el cese de Javier Lacunza como director gerente de NICDO se debe a “un proceso de reflexión” en el que todavía no cuentan con un plan concreto a futuro, ya que “todavía es un poco prematuro” y “a esta reflexión le queda tiempo”.

Como ya señaló el Gobierno de Navarra en la nota de prensa en la que informó el pasado viernes del nuevo nombramiento de Ramón Urdiáin como director gerente de NICDO, Esnaola apuntó que “la sociedad venía inmersa en un proceso de reflexión en los últimos meses, intentando vislumbrar qué líneas o transformaciones son necesarias a cometer para que tras la salida del covid, NICDO siga siendo un referente en el ámbito cultural, deportivo y de ocio”. Tras destacar dos perspectivas de trabajo, “la interna, como tractor de nuestros propios sectores, pero también la externa”, Esnaola explicó que desde antes de la pandemia la Comunidad Foral venía con “una posición muy marcada que nos dejaba en muy buen lugar frente a otras comunidades y que se trataba de mantener”.

En ese sentido, la consejera quiso agradecer a Lacunza el trabajo realizado ya que en una época en la que los sectores de la cultura y el deporte han sido golpeados por el covid, en Navarra “las programaciones no han parado y han sido muy dinámicas”. De hecho, incidió, “que hoy estemos hablando de esta reflexión y no preocupados en recoger los restos de un naufragio se debe a la labor de estos años y de este año covid”.

A la pregunta de si podían avanzar esos planes a futuro de NICDO que respalden el cambio cuando Navarra se ha posicionado ya como referente en los ámbitos cinematográfico y musical, Esnaola incidió en que “a esta reflexión le queda tiempo, ya que comenzó a principios de año y tiene que llevar una organización interna, una clasificación de objetivos y establecimientos de ejes estratégicos”. Un cese sin un plan concreto, por tanto.