"Es peligroso abrir el melón audiovisual en la Academia"

“La Academia debe circunscribirse a su campo”, dijo el recién nombrado presidente en su primera rueda de prensa en la que estuvo acompañado de su vicepresidente primero, el productor Rafael Portela -que repite en el cargo al que accedió en 2018 con el presidente saliente, Mariano Barroso- y la actriz Susi Sánchez, vicepresidenta segunda.

La propuesta de Méndez-Leite (Madrid, 1944) logró 820 votos (un 44 %) de los 1.846 académicos con derecho a voto (de un total de 2.039) en una de las elecciones más participativas de la historia de la Academia, que le habilitan como presidente para los próximos cuatro años. Según explicó Sánchez, el hecho de que se presentaran cuatro candidaturas ha enriquecido a la Academia; cuatro opciones que, además, concurrían con ideas muy similares y muchas cosas en común en sus programas que “han quedado” en rescatar y “apoyarse mutuamente”.

“Queremos una Academia unida desde la base en un trabajo horizontal en el que la Junta directiva también proponga: ellos son los que saben lo que necesita cada gremio”, señaló la actriz de Cinco lobitos.

Temas como la Ley Audiovisual, sobre la que Portela ha prometido “dar voz a las demandas del sector” buscando el encuentro a partir del diálogo, la educación de niños y jóvenes -”con campañas e intervención directa en los colegios: crear una cultura del cine”, apostilló la actriz madrileña- así como la paridad y la sostenibilidad que estarán en una Academia continuista con lo iniciado por Barroso, y antes, por Yvonne Blake.

Tanto Portela como Méndez-Leite se refirieron a la descentralización de la Academia con residencias y actividades fuera de Madrid, con la implicación de ciudades como Barcelona, Valencia o Sevilla en las próximas actividades de formación organizadas en colaboración con el ICAA, o el campus recién inaugurado en Valencia. “Desde el primer momento - señaló el nuevo presidente- nuestro programa es continuista sobre el proyecto de Mariano Barroso, teniendo en cuenta que hoy también se renovaba a mitad de la Junta, ya que nuestro trabajo tendrá que ser respaldado por ellos”.

Con su habitual sinceridad, Méndez-Leite comentó que los Goya, que le parecen “la tarea más difícil de abordar” serán su primera actuación como nuevo equipo directivo; se desplazarán a Sevilla y firmarán el contrato con las instituciones con las que se comprometió el anterior equipo.

“Las ceremonias de entrega de premios son muy difíciles y rara vez salen a mi gusto”, reconoió Méndez-Leite, que ya dirigió una gala en 2006, una experiencia que “fue una pesadilla”. Portela, que ha producido las últimas galas, auguró unos Goya espectaculares e increíbles, con películas como Alcarrás o Cinco lobitos. Sevilla, consideró el vicepresidente, “es un lugar único para esto” e intentarán “hacer una gala que esté a la altura”.

Méndez-Leite recordó que la Academia no tiene capacidad ejecutiva para resolver los problemas del cine, pero sí puede influir en los lugares donde se deciden las cosas; el reto, dijo, “es el general, no solo el cine”.

“Por el cambio de los tiempos la gente va menos al cine, pero podemos ayudar en la formación de ese público, que se acostumbren desde pequeños a ver películas enteras, que ahora ven solo cachitos, y trabajar con los colegios”.

Asimismo, la nueva Presidencia quiere “dar a conocer el cine español, su historia y su presente”, y explicar cada una de las profesiones del cine, hacer encuentros con público o máster clases para los profesionales y “cortejar a colegios e institutos”.

Méndez-Leite se impuso a las ternas encabezadas por la actriz Luisa Gavasa, junto al director Juan Vicente Córdoba y la guionista Virginia Yagüe; la directora de fotografía Teresa Medina, con la documentalista Pilar Pérez Solano y la diseñadora de vestuario Cristina Rodríguez, y la productora Valérie Delpierre, con la actriz Amparo Climent y la guionista Alicia Luna.. l

“Por el cambio de los tiempos la gente va menos al cine, pero podemos ayudar a formar público”

Presidente de la Academia de Cine