En 1995 ganó el Concurso Internacional de Violín Pablo Sarasate y, desde entonces, Ara Malikian ha vuelto en numerosas ocasiones a Pamplona. Este domingo, 25 de mayo, lo hará de nuevo, en esta ocasión a Baluarte y por partida doble, ya que tras conocerse que casi había agotado las entradas para su función de las 21.00 horas, se programó otra a las 18.00, lo que demuestra el tirón que el violinista tiene en este territorio. Aun se pueden conseguir localidades.
Malikian vuelve con su nueva gira, Intruso World Tour, un viaje muy personal en el que el músico parte de la angustia de no encajar en ningún lugar para, por fin, abrazar la riqueza de su identidad multicultural y encontrar su hogar en el mundo entero a través del arte y la música.
Y es que, como cuenta él mismo, “en el Líbano no me consideraban suficientemente libanés porque era de origen armenio; los armenios no me consideraban suficientemente armenio porque había nacido en Líbano; cuando me establecí en Europa no me consideraban europeo porque no había nacido en Europa”. Estas vivencias y la sensación de no pertenecer a ninguna parte “se reflejaron en mi relación con la música”.
Cada nota “resonaba con la nostalgia de un hogar que no existía, un lugar en el que no terminaba de encajar”. Sin embargo, esta condición de intruso “me brindó la oportunidad de explorar y disfrutar de músicas y culturas fascinantes, ajenas a mi propia tradición, aportando mi propia voz, mi experiencia multicultural”.
Gracias a esa condición de extraño en todos los sitios, “el mundo entero es mi hogar”, confiesa. “Mi casa está en mi cuerpo y en mi alma, un espacio infinito donde la identidad se transforma y la música se convierte en un lenguaje universal”, afirma.
En el concierto de este domingo interpretará, en otros, temas de artistas “han sido intrusos en sus comienzos, como el mismo Paco de Lucía o Jimmy Hendrix, y que luego han cambiado el mundo de la música”.