Este miércoles la Escuela Navarra de Teatro acoge a las 19 horas la obra teatral en euskera 52 Hertz, de Ados Teatroa. Es el estreno en Navarra de la versión en euskera de un libreto que habla del aislamiento social, de la incomunicación, la diferencia y el deseo de ser escuchada. Esta obra es parte del ciclo municipal Antzerki Aroa 2025, e inicialmente estaba prevista para 15 de octubre, aunque la función se debió aplazar hasta el mes de diciembre.
El título es una metáfora y hace referencia a una unidad de medida, 52 hercios. Es un extraño sonido registrado en los últimos 35 años en distintos lugares del Pacífico, similar al canto de una ballena azul. Pero las ballenas azules se comunican en frecuencias que van de los 10 a los 39 hercios, por lo que la voz de ese cetáceo, posiblemente sordo, queda fuera del umbral auditivo de la especie.
52 Hertz es un espectáculo creado a partir de testimonios reales de soledad no deseada recogidos previamente en forma de microdocumentales. Los interpretes comenzaron los ensayos sin texto, aunque contaron con una serie de perfiles de personajes escritos en base a personas reales. A partir de ahí, cada actor fue configurando cada papel, aportando también desde su propia experiencia, hasta llegar a un texto cerrado. La obra está interpretada bajo la dirección de Garbi Losada. La directora es también autora del texto junto con José Antonio Vitoria y la versión en euskera está firmada por Bego Losada.
El elenco combina actores y actrices ya consagrados y con una larga trayectoria artística tanto en teatro cine y TV como: Joseba Apaolaza (Artea, El silencio roto, Aquí no hay quien viva); Ainhoa Aierbe (Kutsidazu bidea Ixabel, El guardian invisible, Goenkale) y Martxelo Rubio (27 horas, El comisario), con artistas más jóvenes, pero también consolidados como el actor, físico y bailarín Aitzol Iraola (Zirriborro) y la actriz Amaia Irazabal (Itsaso).