Juan Martínez de Irujo se ha quedado fuera de las semifinales del Campeonato de Parejas de la LEP.M, ronda que no se perdía desde 2008. La diferencia es que hace cuatro años no pudo disputar ni un partido de la competición por culpa de una lesión (Patxi Eugui y Mikel Olazabal cubrieron su baja compartiendo gerriko con Oskar Lasa), mientras que ahora no ha superado la fase inicial tras la disputa de 14 partidos (se perdió dos por culpa de una enfermedad). Y eso que todos le colgaron el cartel de favorito al emparejarle Aspe con un zaguero de la talla de Abel Barriola. Sin embargo, una serie de circunstancias adversas, incluidas unas inoportunas paperas y un juego tremendamente irregular, sobre todo en la segunda parte del torneo, han condenado al delantero de Ibero y al zaguero de Leitza a una tan prematura como inesperada eliminación. Y es que Irujo es un asiduo de las últimas rondas del Parejas.
Debutó Irujo como profesional en junio de 2003, por lo que tuvo que esperar medio año para estrenarse en el Parejas. En su primera participación, en 2004, disputó y perdió la final en compañía de Oskar Lasa, pero después se sacó la espina calándose sendas txapelas en las dos ediciones posteriores: en 2005, junto a Fernando Goñi; y en 2006, con el ahora concejal Peio Martínez de Eulate. Después llegó el bache.
El de Ibero se quedó sin semifinales durante dos años consecutivos. En 2007 perdió la plaza en la cancha, mientras que en 2008 fue por culpa de una lesión que ni siquiera le permitió disputar el torneo. En 2007 completó una primera fase espectacular. Junto a Fernando Goñi, ganó los cuatro partidos de la ronda inicial, pero en cuartos de final (una eliminatoria al mejor de tres partidos) se marchó para casa tras ceder ante Bengoetxea VI y Patxi Ruiz en dos igualados duelos que cayeron ambos del lado del leitzarra y el estellés.
una decepción Sin embargo, desde que se suprimieron los cruces de cuartos de final, Irujo nunca se había perdido las semifinales. Al menos estando sano. Y además jugando casi siempre con zagueros noveles. A excepción de en 2009, el año de su última txapela del Parejas, en el que formó con un veterano como Fernando Goñi, siempre ha estado acompañado por pelotaris debutantes. En 2010 fue semifinalista con Mikel Beroiz, que por aquel entonces daba sus primeros pasos en el profesionalismo, mientras que en la pasada edición del Parejas estuvo muy cerca de alcanzar la final con el jovencísimo David Merino.
Se da la circunstancia de que sus dos últimos zagueros han accedido ahora a semifinales (Beroiz no conoce la derrota junto a Aimar, mientras que Merino II logró el pase junto a Titín III una jornada antes de que concluyera la primera fase), mientras que Irujo las tendrá que ver por televisión o desde la grada pese a que Aspe le concedió el honor de formar un tándem más que temible junto a Barriola.
Pero ni el delantero de Ibero ni el zaguero de Leitza han ofrecido su mejor versión y se han quedado fuera del campeonato. "Si no pasamos, es porque no nos lo merecemos", decían antes de que se concretara una eliminación que ellos mismos califican como "decepcionante".