Ares del Maestrat (Castellón) - Jesús Herrada (Cofidis) ganó ayer jueves la sexta etapa de la Vuelta a España, entre Mora de Rubielos y Ares del Maestrat, de 198,9 kilómetros, por delante del belga Dylan Teuns (Bahrain), que es el nuevo líder de la carrera. El grupo de los favoritos, con el anterior líder, Miguel Ángel López, entró a 5:43 del vencedor. Aunque Astana se propuso en un principio mantener el liderato del colombiano, en los últimos kilómetros redujeron el ritmo y dejaron marchar al nuevo maillot rojo que, de todas formas, no presenta ninguna amenaza real para luchar por las primeras posiciones de la general al final de la Vuelta.

La etapa de ayer fue especialmente accidentada. En la primera parte de la jornada, una montonera provocada sin intención por Tony Martin, derivó en el abandono de hombres importantes. Education First fue el equipo más damnificado. Su líder Rigoberto Urán y otro de los hombres importantes del conjunto, Huge Carthy, tuvieron que abandonar la carrera. Higuita, también del EF, llegó a meta magullado tras verse implicado en el incidente. En la misma montonera, el exlíder de la carrera Nicolas Roche (Sunweb) y el alavés Víctor de la Parte (CCC) dijeron adiós a su participación en la prueba.

Mora de Rubielos, localidad turolense enclavada Sierra de Gúdar, impulsó una de esas etapas llamadas rompepiernas, con puertos encadenados y subidas y bajadas constantes que desembocaban en una meta elevada con aliciente. Costó la formación de la fuga, que se construyó con 11 corredores en el km 36 con nombres importantes. Amenazaba el rojo David de la Cruz, a 4.35 del líder. En el grupo estaban, entre otros, Teuns, Jesús Herrada, Nelson Oliveira y Van Garderen.

Antes lo había intentado un grupo con Poels, pero el ciclista holandés del Ineos no obtuvo el beneplácito del gran grupo, y tras puntuar en el Puerto de Nogueruelas (2ª) y el de Linares (3ª), pasó al pelotón, donde el Astana aún no había puesto luz verde para aventuras.

En el Puerto de Culla (3ª), a 35 de meta, movió ficha el etíope Tsgabu Grmay (Mitchelton), a quien se unió el portugués del Movistar Nelson Oliveira. Ambos, buenos rodadores, comenzaron el puerto final con algo más de medio minuto de margen con respecto a sus rivales en la fuga. En el descenso del puerto de tercera categoría, Tejey Van Garderen, que circulaba en la corte que se jugó la victoria, sufrió otra caída que le privó de luchar por la etapa. Día para olvidar para el Education First.

Restaba el ascenso final, aliciente estelar de la jornada. Subida tendida de 7 kilómetros al 5 por ciento hacia la meta de la localidad castellonense de Ares del Maestrat.

A 4 kilómetros de la cima atacó Dylan Teuns y Herrada se soldó a su rueda. Ambos cazaron y superaron a Oliveira y Grmay. El belga tenía que obtener segundos de margen con De la Cruz para acabar de rojo y, por detrás, Astana marchaba encantado de perder el maillot de líder.

El duelo tenía premio doble. Nadie iba a perder. Herrada tenía en mente lograr su sueño de alzar los brazos en la Vuelta y aliviar la pena de José. Y Teuns subir al podio como primer clasificado de la general. El de Mota del Curvo (Cuenca) dio su estocada a 300 metros de meta. El belga del Barhein no hizo por coger la rueda de su rival y el del Cofidis, pudo celebrar con rabia la victoria. Godon, del AG2R-La Mondiale, completó el podio de la etapa.

Entre los favoritos, solo se movió el joven esloveno del Emirates Tadej Pogacar. Todo para cruzar la línea a 5.41, y a 2 segundos del resto de candidatos de la general.

Todos contentos. Incluso el Astana, que cede la responsabilidad de tener que defender el liderato tras una jornada en la que no encontró colaboración de ninguno de los otros equipos que optan al premio gordo en esta Vuelta. Hoy se disputa la séptima etapa, entre Onda y Mas de la Costa, de 183,2 kilómetros. Meta en alto tras un ascenso de 4,1 km al 12,3 por ciento, una pared para que se prueben los favoritos. - Efe/DN