Tottenham0

Liverpool2

TOTTENHAM Hugo Lloris, Kieran Trippier, Toby Alderweireld, Jan Vertonghen, Danny Rose; Moussa Sissoko (Eric Dier, m.74), Harry Winks (Lucas Moura, m.65); Dele Alli (Fernando Llorente, m.81), Christian Eriksen, Son Heung Min y Harry Kane.

LIVERPOOL Alisson Becker; Trent Alexander Arnold, Joel Matip, Virgil Van Dijk, Andrew Robertson; Jordan Henderson, Fabinho, Georginio Wijnaldum (James Milner, m.62), Mohamed Salah, Roberto Firmino (Divock Origi, m.58) y Sadio Mané.

Goles 0-1, m. 2: Salah, de penalti; 0-2, m. 87: Divock Origi.

Árbitro Damir Skomina (SVN).

Estadio Wanda Metropolitano de Madrid ante unos 67.800 espectadores.

Madrid - Un penalti transformado por el egipcio Mohamed Salah a los dos minutos y otro tanto del belga Divock Origi (minuto 87) para sentenciar bastaron al Liverpool para reencontrarse con la gloria, conquistar la sexta Liga de Campeones de su historia y enterrar la fama de perdedor de su técnico, el alemán Jurgen Klopp, que ya tiene el ansiado trofeo.

El disparo desde los once metros resume un choque cargado de alicientes, prometedor, pero superado por el exceso de respeto, la falta de ritmo y la escasa precisión. Solo resucitó al final. Cuando el Tottenham acudió a la desesperada en busca del empate y se frustró del todo con la sentencia de Origi sin solución.

Fue la reconquista de Europa del Liverpool, que dejó al Tottenham sin completar su sueño en una temporada plagada de milagros pero cruel al final.

Le bastó con esos dos destellos al Liverpool para dejar atrás sus decepciones recientes y devolver al primer plano de la competición al fútbol inglés, que puso fin al exitoso ciclo español, acaparador de la copa en el último lustro. En Madrid, el Liverpool recupera la gloria para Inglaterra que tuvo al Chelsea, en el curso 2011-12 tras vencer en los penaltis al Bayern Múnich, a su último campeón.

Más han tardado los reds en recuperar el mando. Catorce temporadas después el Liverpool manda en Europa el día que Klopp se reencontró con el éxito después de siete finales perdidas. La más reciente la del pasado año en Kiev. Aunque también dolorosa la del 2013, cuando dirigía al Borussia Dortmund ante el Bayern en Wembley.

El duelo comenzó sin reserva alguna. Ni Mauricio Pochettino ni Jurgen Klopp quisieron ahorrar nada en la final. El técnico argentino tiró de Harry Kane, a pesar de estar fuera de la competición desde que se lesionó en el tobillo derecho el pasado 9 de abril contra el Manchester City.

Abanderó el ataque de su equipo el capitán inglés para los Spurs igual que Roberto Firmino en el Liverpool. La presencia del brasileño era presumible. Llevaba tiempo ejercitándose con normalidad con el resto del plantel. La duda expresada por su entrenador en la víspera solo podía formar parte de la estrategia. Los reds ya tenían a su tridente de nuevo.

Una puesta en escena alentadora igual que el arranque del partido, desnivelado en la primera jugada. Nada más sacar de centro. En el primer balón que llegó al área del Tottenham y que fue recogido por el senegalés Sadio Mané. Su intento de pase fue interceptado con el brazo por el francés Moussa Sissoko. El egipcio Mohamed Salah no falló desde los once metros y puso por delante al Liverpool a los dos minutos de juego.

El gol encajado asustó al Tottenham, invadido por la imprecisión y por el temor a encajar un nuevo revés que fuera definitivo. No hubo noticias de Alisson hasta ese momento, el portero red, casi un mero espectador por su área.

El Liverpool, lejos de intentar aprovechar las dudas de un rival atemorizado, optó por especular, por adormecer el juego, agotar el tiempo y jugar al fallo del rival. Fueron los laterales los que amenazaron a Hugo Lloris en acciones puntuales.

Pochettino pensó en Lucas Moura, que se ganó el derecho a ser protagonista en la final tras el hat trick de Amsterdam. Dispuso de media hora el brasileño, en medio de un partido ya con más espacios pero sin ocasiones de gol.

Se desató el Tottenham al final. Encerró al Liverpool en su área y encontró ocasiones de sobra para llevar el choque a la prórroga. Primero con un tiro del surcoreano Son Heung Min y acto seguido de Lucas Moura. Bajo palos se topó con Alisson, una garantía. Son tuvo otra después, pero el meta brasileño destacó.

En pleno entusiasmo londinense, con Fernando Llorente ya en el campo ante la desesperación de una igualada que no llegaba, Origi evitó la zozobra y la posibilidad de la prórroga al superar a Hugo Lloris con un tiro cruzado, rubricar la final y ensanchar la historia del Liverpool. - Efe

Salah marca el tercer gol más rápido en la historia de las finales. Mohamed Salah marcó el tercer gol más rápido en la historia de las finales de la Copa de Europa, anotando de penalti a los 108 segundos el 0-1. Hasta la fecha, los tantos más rápidos son de Enrique Mateos con el Real Madrid, en 1959 para conquistar ese año la extinta Copa de Europa, y de Paolo Maldini para el AC Milan, en 2005 con el actual formato de la UEFA Champions League, y curiosamente ante el Liverpool, y cuando ni siquiera había pasado un minuto.

Los hinchas del Liverpool ganan en la grada. Los seguidores del Liverpool FC ganaron la batalla previa al pitido inicial gracias a su habitual tema You’ll Never Walk Alone y para acallar igualmente los abucheos de la afición del Tottenham. La mística de esta canción en las gargantas de los reds volvió a retumbar en los prolegómenos del partido, en primera instancia gracias a la ayuda de la megafonía y a viva voz para las estrofas finales. Detenida por vender dos entradas por 8.400 euros.

El balance de detenidos antes del partido era de cinco personas, de las que cuatro son hinchas británicos y la quinta es una venezolana acusada de vender dos entradas falsas por 8.400 euros. La arrestada es una mujer de 32 años que las ofreció por 8.400 euros a dos personas que portaban un pequeño cartel en la zona de la Puerta del Sol en el que se podía leer “Compro entradas al partido”. Las víctimas, un rumano de 43 años y su amigo, se dieron cuenta enseguida del engaño y lo denunciaron a los agentes de la Policía Nacional.

Decomisados 300 litros de cerveza en el AVE Alicante-Madrid. Más de 300 litros de cerveza y algunos licores, sobre todo ginebra, whisky y vodka, fueron decomisados en la estación de tren de Alicante a los seguidores del Tottenham y del Liverpool afincados en la provincia que viajaban a Madrid. La mayor parte del alcohol incautado es cerveza, portada en paquetes de 12 e, incluso, 24 unidades, aunque también hay bebidas de mayor graduación.

4.700

Agentes desplegados. La Delegación de Gobierno en Madrid desplegó “un ingente” dispositivo policial en Madrid capital y en toda España formado por 4.700 agentes de la Policía Nacional para velar por la seguridad durante la final.