Bilbao - Alex Txikon y su equipo se mantienen en el Campo Base del K2 esperando “una ventana de buen tiempo”, tal y como explica el propio alpinista vizcaíno, puesto que las fuertes rachas de viento impiden tanto a su expedición como a la ruso-kazajo-kirguís, dirigida por Vassily Pivtsov, entrar en acción. Ambos equipos están en plena lucha por intentar coronar en invierno la segunda montaña más alta del planeta, algo que nadie ha conseguido hasta el momento. Sin embargo, parece que ninguna de las dos expediciones arriesgará ante las malas condiciones climatológicas. “Los últimos días han sido de muy mal tiempo y hace muy difícil manejar situaciones que ya son de por sí complicadas. Las previsiones de mejora que daban para el fin de semana no están claras y estamos valorando qué hacer”, explica Txikon.

Por el momento, el lemoarra anuncia que, después de abandonar su proyecto en la cara más peligrosa del K2 y retroceder hasta la ruta más clásica, la de los Abruzzos, su equipo ha conseguido equipar la pista hasta los 6.700 metros, justo donde empieza a complicarse el ascenso. “Los últimos días estamos guardando fuerzas, ya que hemos hecho una salida hasta el campo dos y hemos estado dos días equipando. Pero esto no es para estar jugando, aquí el invierno va para largo y tenemos que ser muy eficaces”, anuncia Txikon. Así pues, el alpinista vizcaíno se mantiene a la espera una nueva ventana de clima que le permita acercarse un poco más a los 7.000 metros. - N. Marcos