pamplona - El frontón Labrit de Pamplona acogió ayer las finales del Campeonato Manomanista Elkarpelota, que celebró el broche final de su cuarta edición por todo lo alto ante los cerca de dos centenares de personas que se acercaron a las gradas de la cancha pamplonesa para disfrutar de los pelotaris entrenados en el centro de tecnificación promovido por los expelotaris profesionales Juan Martínez de Irujo, Fernando Goñi, Patxi Eugi y Peio Martínez de Eulate.
Este año las txapelas de un torneo en el que cada edición va subiendo el nivel y el prestigio entre los clubes y los aficionados pelotazales fueron para Etxeberria, en prebenjamín; Laso, en benjamín; Etxeberria, en alevín; Salsamendi, en chicas sub-14; Garaño, en infantil; Lazkoz, en cadete; Villanueva, en juvenil y Olatz Ruiz de Larramendi, en la categoría femenina.
Precisamente fue la victoria de Olatz, en el octavo y último encuentro del festival, uno de los mejores momentos de la jornada tras vencer a su tía Maite en un encuentro en el que supo superar sus problemas físicos y sumar una tacada de ocho tantos -del 11-10 al 11-18- para llevarse la victoria.
En lo referente a las demás categorías, el encuentro con más tensión a nivel de resultado fue el de prebenjamines, en el que Etxeberria (Irur-tzun), que fue ganando 15-9, tuvo que sufrir ante Orquin (Buruzgain), que apretó hasta el 15-14, tanto en el que terminó cediendo el partido.
El encuentro inaugural hizo presagiar una emoción que no fue luego palpable en los demás partidos, con resultados mucho más abultados de lo que a priori se pensaba. No obstante, y a pesar de la ausencia de marcadores apretados, se pudo ver la calidad del futuro de la pelota navarra, sobre todo a partir de la categoría infantil, cuando los y las pelotaris tienen la fuerza suficiente para abrir huecos en el frontón y aprenden a terminar los tantos.
En ese registro destacaron Garaño, Lazkoz, Villanueva y Olatz Ruiz de Larramendi, quienes consiguieron los títulos en sus respectivas categorías. - D.N.
