Me llamo Alba, tengo 31 años, y escribo estas líneas con el deseo de expresar públicamente un agradecimiento profundo y necesario.

El pasado 22 de diciembre, un día marcado para muchos por la lotería de Navidad, llegó para mí la lotería más importante de mi vida: la llamada que anunciaba que había aparecido un donante de riñón . Un gesto solidario que cambió mi destino. Apenas unas horas después, el 23 de diciembre a las 7 de la mañana, entraba en el quirófano para recibir un trasplante que hoy me permite mirar al futuro con esperanza.

Mi primer agradecimiento es para la persona donante y para su familia. En un momento de enorme dolor, tomaron una decisión generosa que ha salvado vidas. Aunque no conozca sus nombres, su gesto quedará para siempre ligado a mi historia. Gracias por regalar vida cuando más difícil es hacerlo. Gracias.

Quiero reconocer también la labor del Hospital de Navarra, en especial del grupo de Nefrología, así como de todo el personal de enfermería y médico que me ha acompañado durante estos meses. Su profesionalidad, cercanía y calidad humana han sido fundamentales en cada etapa del proceso.

También agradezco a la Clínica Universidad de Navarra, responsable de llevar a cabo el trasplante. El rigor médico, la coordinación y el trato humano de todo su equipo han sido ejemplares en un momento tan importante de mi vida.

No me puedo olvidar de Alcer, que me han hecho todo un poco más fácil y me han ayudado en todo en este proceso tan duro.

Esta experiencia me ha hecho consciente del desconocimiento que aún existe en torno a la donación de órganos. Muchas veces no somos plenamente conscientes de su importancia hasta que nos toca de cerca. Donar órganos no solo salva vidas: devuelve futuro, proyectos y esperanza. Hablar de ello y expresar nuestra voluntad puede marcar una diferencia enorme.

Gracias a la sanidad, a la ciencia y, sobre todo, a la solidaridad de las personas donantes y sus familias, hoy puedo decir que he recibido el mayor premio posible: una nueva oportunidad de vida. Ojalá estas palabras sirvan también para concienciar sobre la importancia de la donación de órganos.