- A Meg le encanta nadar, lanzarse en cualquier pantano en busca de un palo. Cuppy también es un enamorado del agua y una de sus aficiones es ir corriendo detrás de los pájaros. A Negu le gusta desfogarse con grandes caminatas, incluidas aventuras por el monte. Y Pancho es fiel amigo de los paseos largos y tranquilos por los alrededores de su pueblo. Los cuatro son perros y, seguramente, jamás pasaron tanto tiempo junto a sus dueños: Bynho, jugador de Osasuna Magna; Carlos Chocarro, capitán del Helvetia Anaitasuna; Mai Garde, capitana de Osasuna; y David García, capitán del Aspil-Jumpers Ribera Navarra, respectivamente.

Ahora ya no hay largas caminatas. Ni salidas al monte para desconectar. Las medidas excepcionales adoptadas por el Estado de Alarma actual permiten a quienes tienen perro sacarlo a la calle, pero bajo unas condiciones muy acotadas: sólo para las necesidades fisiológicas del animal y sin mantener contacto con ningún otro perro o persona. Nada más. Y estos cuatro deportistas, al igual que la inmensa mayoría de la población, cumplen con las normas establecidas.

A Bynho, Carlos Chocarro, Mai Garde y David García tener un perro les permite pisar algo más la calle. Es cierto. Airearse esos pocos minutos que están fuera de su casa. No obstante, para los cuatro, sus mascotas son más que un salvoconducto para salir del domicilio -cumplen con el confinamiento a rajatabla-. Meg, Cuppy, Negu y Pancho son sus amigos, sus fieles compañeros, quienes dan cariño sin reclamar nada a cambio y quienes, pasen lo que pase, están ahí. Un tesoro muy valioso.

Dueño de 'Meg'

Con ganas de nadar

En 2017, el brasileño Alberto Ferraz Barboza, Bynho, fichaba por el Xota. Sin embargo, no fue hasta un año después cuando Meg, una perrita de la raza jack russell, se cruzó en su camino. Ahora son inseparables. "En Brasil ya tenía perro. Cuando vine a Pamplona decidí no tener de primeras, hasta ver cuál iba a ser mi futuro en el club. Cuando ya vi que me quedaba más tiempo, que me iba asentando en el equipo, entonces cogí a Meg. Me hace muchísima compañía", explica.

Con apenas un año y nueve meses, esta pequeña perra se ha convertido en imprescindible en la vida de Bynho. Es alegre y muy vivaracha. "Siempre estamos jugando. En casa o en la calle", dice el brasileño. Le encanta disfrutar del aire libre aunque, como recalca su dueño, "ahora es diferente". "Sí que la noto que está quizás un poco más triste, imagino que por salir menos a la calle", opina. No es de extrañar. Sus paseos se han acortado, ya no corren juntos tanto como lo hacían antes del confinamiento, y eso es algo que Meg arrastra. "Lo primero que haré cuando todo esto se termine y podamos salir será llevarla a un pantano. Es una perra a la que le encanta nadar. Le tiro un palo y ella se lanza a por él. Necesita jugar, necesita nadar y es lo que haré", asegura Bynho.

Dueño de 'Cuppy'

Capaz de levantar el ánimo

El capitán del Helvetia Anaitasuna, Carlos Chocarro, es un gran amante de los animales. Él y su pareja, Silvia Lima (exjugadora del Beti Onak y del Lagunak de balonmano), conviven en su piso de Barañáin con un perro, Cuppy, y con un gato, Jackson -en honor de Jackson Richardson-.

Cuppy llegó a sus vidas hace unos dos años y, desde entonces, se ha convertido en uno más de la familia. Aunque no siempre se llamó así. "Cuando lo adopté se llamaba Puppy. Le cambié de nombre por un gato que tenía mi abuela que se llamaba Cuqui. Al final hice una mezcla entre los dos nombres y se quedó Cuppy", explica Chocarro, quien recuerda además que fue a recoger a su mascota junto a un excompañero de equipo, Erik Balenciaga.

Este pequeño, que ahora tiene unos dos años y medio, es una mezcla de razas, "con algo de cazador y de pastor", comenta. "Le gusta mucho el agua e ir detrás de los pájaros", añade.

El capitán de Anaitasuna es consciente de que tener una mascota como un perro "condiciona", pero asegura que merece la pena. "Son animales muy nobles. Claro que te hacen cambiar tu forma de vida, pero se hace con gusto. Hay muchas veces que da bastante pereza sacarlo, sobre todo por las noches. Cuando ya has cenado y a lo mejor quieres estar tranquilo, pero es lo que hay. Al final, te dan muchas cosas de las que sólo eres consciente cuando los tienes", constata.

Las costumbres de Cuppy han cambiado desde que hay cuarentena. Sigue saliendo tres veces al día, pero ahora los paseos son bastante más cortos. "Lo llevamos sin soltar", explica el capitán del Helvetia Anaitasuna, quien asegura que toda esta situación generada a causa del coronavirus también está afectando de alguna manera al animal. "Se le nota, sí. Está un poco más ansioso y ladra más de la cuenta, porque seguramente no tiene la actividad que tenía antes. Además, nos tiene todo el día a nosotros en casa", señala.

Cuppy ha sabido calar hondo en todos los miembros de la familia, algunos más amantes que otros de los animales. Lo que está claro es que, junto a Jackson, es un miembro más. Capaz de "recibirte feliz, con alegría, y de levantarte el ánimo aunque hayas tenido el peor de los días".

Dueña de 'Negu'

Cariño y fiel compañía

Negu era apenas un cachorro cuando Mai Garde lo adoptó. Fue hace unos cuatro años y medio, en invierno (de ahí su nombre en euskera) y, desde entonces, se ha convertido en fiel compañero de la capitana de Osasuna.

La futbolista navarra tenía claro que, cuando se independizara, acabaría adoptando un perro. "Mis padres siempre han tenido en el pueblo perro y yo sabía que, cuando me fuera a vivir por mi cuenta y pudiera, tendría uno. Tengo la suerte de tener terraza, algo que me da la vida a mí y al perro. Para darle algo de libertad, aunque sea en una casa", comenta.

Negu no tiene una raza definida. Es una mezcla de varias. Es un perro "muy cariñoso" que, conforme ha ido creciendo, se ha ido tranquilizando. "Al principio era un terremoto. Me reventaba cualquier cosa que pillaba por casa y me rompía todo. Ahora se ha calmado mucho, aunque sigue siendo puro nervio. Le hace falta correr y es algo que se lo estoy notando mucho en estos momentos, a pesar de que le saco tres veces al día. Hace sus necesidades y poco más", relata.

A Mai Garde, tener ahora mismo a su perro le da "la vida". Sin embargo, lo que más valora de él es, sin duda, "el cariño que me da". "No he pasado tanto tiempo con él nunca y creo que está flipando un poco. Nota lo que está pasando. Cuando todo esto termine, me lo llevaré a que corra. Es lo que necesita. Y a dar buenos paseos por los montes de Navarra", asegura.

Dueño de 'Pancho'

El instinto protector

David García, capitán del Aspil-Jumpers Ribera Navarra, lleva el amor por estos animales en el ADN. Su padre es criador de perros y hace cinco años le regaló un precioso bulldog francés a su mujer. Desde entonces, Pancho es un miembro más de la familia.

Este año, esa familia se ampliará. Su esposa está embarazada de mellizos, un estado que no ha pasado desapercibido para su mascota. "Está más protector y atento con ella. Yo lo veo igual, la verdad, pero mi mujer me dice que sí lo nota más protector", explica.

Pancho es un perro "activo, muy cariñoso, que se porta muy bien y que sabe entendernos", asegura el capitán del conjunto ribero, quien es un enamorado de estos animales. "Dan mucha confianza, fidelidad. Parece que intuyen además los momentos malos y son un apoyo incondicional", relata.

Al igual que el resto de compañeros de su especie, Pancho también está sufriendo las consecuencias del confinamiento en casa. Sus tres salidas diarias a la calle no se las quita nadie, claro está, si bien se han convertido en más cortas de lo habitual. "Yo vivo en Murchante y antes de todo esto nos encantaba desconectar dando paseos largos con él, por el monte. Ahora es diferente", explica David García. No es de extrañar, por lo tanto, que en cuanto finalice la cuarentena, una de las primeras cosas que hará junto a su fiel amigo será "irnos a dar un gran paseo. A seguir desconectando, a estar en contacto con la naturaleza". Un buena plan, sin duda, para todos los amantes de los perros.

'Negu', de Mai Garde. La capitana de Osasuna adoptó a 'Negu' en invierno, de ahí su nombre (en euskera). Lo hizo hace cuatro años y medio aproximadamente, cuando se independizó. Es multiraza.

'Pancho', de David García. Es un bulldog francés. El padre del capitán del Aspil es criador de perros y fue un regalo para su mujer.

'Cuppy', de Carlos Chocarro. Tiene unos dos años y medio, es multiraza, y el capitán del Helvetia lo adoptó.

'Meg', de Bynho. La perra del jugador del Xota es de raza jack russell y tiene un año y nueve meses.

Paseos cortos e individuales. Las medidas adoptadas durante el Estado de Alarma por la crisis del coronavirus permiten a los dueños de perros sacar a sus mascotas a la calle, pero con unas condiciones. Los paseos deben ser cortos, sólo para cubrir las necesidades fisiológicas del animal. Asimismo, quien saque a su perro debe hacerlo solo, sin compañía, y evitar el contacto con otros animales o personas. Se debe intentar, además, priorizar los horarios con menor afluencia de gente.

"Lo primero que haré cuando todo esto termine será llevarla a un pantano para que nade"

Jugador de Osasuna Magna

"Los perros son animales muy nobles. Claro que cambian tu forma de vida, pero se hace con gusto"

Capitán dle Helvetia Anaitasuna

"No he pasado tanto tiempo con él nunca y creo que está flipando un poco por tenerme tanto en casa"

Capitana de Osasuna

"Dan confianza. Parece que intuyen los malos momentos y son un apoyo incondicional"

Capitán del Aspil-Jumpers