En el imaginario de muy pocos, al principio de la temporada, entraba la posibilidad que se le abre este martes a Osasuna Magna. El equipo de Irurtzun está a un paso, a sólo 40 minutos de juego, de clasificarse para la próxima Copa de España que se disputará en Jaén del 31 de marzo al 3 de abril. Para ello debe ganar sí o sí al Movistar Inter, rival con el que pugnará por la plaza que aún queda vacante y que, por lo tanto, saldrá como un tsunami sobre la pista de Anaitasuna para amarrarla.

Este encuentro cierra la primera vuelta en la Primera División para el Xota. El covid ha impedido que se pudiese jugar con anterioridad y llega en un momento en el que, más que un partido de Liga, supone una auténtica final. Porque las cuentas son claras: una victoria da el billete a los navarros para el torneo por excelencia del fútbol sala; una derrota implica la clasificación automática del Inter; y, en caso de empate, es el Córdoba el equipo que se planta en Jaén.

Cabe recordar que la Copa de España la disputan los ocho mejores de la primera vuelta. Por lo tanto, con esta referencia, el Córdoba ocupa la octava plaza con 21 puntos y un golaverage a favor de +6. El conjunto de Torrejón de Ardoz se sitúa décimo con 20 puntos, un promedio de goles de +4 y un enfrentamiento menos, el que debe jugar este martes ante el Xota, que alcanza los 19.

Ante este panorama, el escenario es claro. A Osasuna Magna sólo le vale el triunfo. La Copa está al alcance y aunque el objetivo prioritario desde el comienzo de la temporada -y que no cambia- es la permanencia en la categoría, no está dispuesto a renunciar a semejante premio. Así lo constata el técnico del equipo, Imanol Arregui: "No era de esperar, sin duda, pero estamos a un partido. Sabemos cuál era el objetivo desde antes de empezar la temporada, pero hemos llegado a esta situación y por supuesto que la vamos a competir".

El preparador navarro insiste en que viajar a Jaén supondría "un premio" para los suyos y que la única presión con la que saltarán este martes a la pista azul de Anaitasuna será "la que nos metamos nosotros mismos". "Siempre salimos a por el partido, nunca nos conformamos con el empate. Si el marcador es igualado, sacaremos el juego de cinco, como hacemos siempre. No nos vale más que ganar y a ellos, también".

Enfrente tendrá un Movistar Inter que está sufriendo más de lo esperado esta temporada, lidiando entre la parte media y baja de la tabla, cuando su zona de confort siempre ha sido la más noble. El equipo de Tino Pérez, sin Supercopa y fuera de la Copa del Rey, no está dando con la tecla este curso y quedarse fuera de una competición como la que está en juego, de la que es vigente campeón, sería toda una catástrofe. Un "batacazo", en palabras de Imanol Arregui.

"No sé qué le pasa al Inter. Me he visto muchos partidos suyos de esta temporada que han acabado perdiendo y el año pasado ganaban por 5-1. Están generando muchas ocasiones y quizás les falta esa confianza que te dan los puntos. Están en una situación irreal y anormal para el club que es. Pero va a ser un partido durísimo, porque para ellos va a ser una final", advierte el técnico navarro sobre un rival que cuenta con caras conocidas como las del irurtzundarra Dani Saldise o Eric Martel.

El Xota, mermado físicamente por la acumulación de partidos -será el tercero en menos de una semana, dentro de un calendario muy apretado-, tendrá de nuevo las bajas de Juninho, de Tony Escribano y de Bynho. Ahora bien, estará empujado no sólo por el aliento de su afición, sino también por el triunfo del viernes ante ElPozo Murcia y que da "mucha tranquilidad" al equipo, como reconoce Imanol Arregui. "Aunque en Manzanares estuvimos horribles, llevábamos tres partidos jugando bastante bien, pero sin ese acierto de cara a puerta. Las derrotas al final te hacen mella y un encuentro así te da un empuje muy fuerte".

Un empuje, una confianza y una motivación que serán necesarios para ganar este martes a Inter y regresar, dos años después, a una Copa de España junto a Barça, Valdepeñas, Pozo, Palma, Cartagena, Jaén y Aspil-Jumpers.

Martil: "Lo afrontamos como una final"

Con once participaciones, Roberto Martil es el jugador en activo del Xota que más Copas de España ha disputado. Es la competición "más bonita", asegura, y confía en poder vivirla más veces. Si es este año, mejor.

Para el capitán navarro, este torneo "es una pequeña ilusión" en una temporada donde el objetivo primordial era y sigue siendo "la salvación y no pasar apuros" como el curso pasado. "Pero hemos ido haciendo las cosas bien e incluso con los contratiempos de las lesiones, hemos ido sacando puntos. Nos hemos visto con este otro objetivo y, ahora que estamos tan cerquita, lo vamos a afrontar como una final", constata.

La voz en el vestuario del Xota sabe que el partido ante el Inter no será nada fácil, que su rival irá a Pamplona a morder y a clasificarse para un torneo del que es actual campeón. Pero intenta igualmente transmitir a sus compañeros esa ilusión que él siente por viajar a Jaén. "Intento trasladarles mis experiencias. Es la competición más bonita, donde se reúnen los mejores jugadores del mundo, los mejores equipos, con todo tipo de aficiones y el ambiente que se vive en una Copa no se vive en ninguna otra competición. Es precioso. Les digo eso para que cojan la motivación de ir, sin querer meterles presión", puntualiza.

Jugar en casa, en Anaitasuna, supone además "un plus" de cara a este enfrentamiento, en opinión de Roberto Martil, que llama a la afición "para que haga un esfuerzo, no le entre la pereza al ser un martes y venga a animarnos, que nos va a hacer falta".

Un empuje necesario, máxime con un equipo que físicamente arrastra una gran acumulación de partidos. "Hay gente que está jugando muchos minutos. Pero no se puede llorar. Hemos estado jugando así toda la primera vuelta y no nos tiene que servir de excusa, sino de motivación y de responsabilidad", resalta.

El capitán del Xota tendrá enfrente este martes a Dani Saldise, un excompañero, pero sobre todo un amigo. "Hablo con él prácticamente a diario. Ellos están pasando momentos difíciles y él también. Pero es bonito ver cómo un chaval de Irurtzun ha llegado hasta ahí y seguramente le queden muchas cosas por ganar. Será bonito también jugar contra él, aunque en la pista no habrá bromas que valgan".