pamplona - Xavier Cazaubon, presidente de la Federación Internacional de Pelota Vasca (FIP), compareció en el foro de deporte para analizar desde su perspectiva el pasado, presente y futuro de la pelota.

Cazaubon, que no quiso meterse en el tema de la polémica de Bixintxo, que posó con la ikurriña en el podio del Campeonato del Mundo de Barcelona, focalizó su análisis en tres vertientes: la renovación, la consolidación y la expansión. “Cuando llegué a presidir la Federación Internacional de Pelota, la situación que me encontré fue la siguiente: dos euros en caja y la sede hipotecada. Y había que empezar a trabajar”, señaló.

La renovación, para el franco mexicano, “era muy clara, había que cambiar los estatutos y la fórmula de juego y la de los campeonatos. Y había que regresar a la familia olímpica, porque sin ella no habría futuro para la pelota. En 2015 había que hacer una asamblea general extraordinaria y cambiar los estatutos. La primera medida que tomé fue cancelar el turismo deportivo”.

En cuanto a los mundiales, Cazaubon recordó que el de 2014, en México, “empezó sin luz, sin agua y sin vestuarios y, además, se cae la malla al gobernador y por primera vez desde 1952 no hubo partido inaugural. Las canchas estaban mal hechas, y ese era nuestro patrimonio. El 85% de los deportistas se conocía todos los bares y nosotros estábamos sin televisión, sin radio ni periodistas. Quisimos hacer un proceso clasificatorio para el Mundial”.

Es por eso que, con el paso del tiempo, el Mundial de Barcelona elevó el nivel de la pelota. Y, para refrendarlo, el presidente de la FIP enumeró una serie de competiciones que va a organizar la pelota. “En el año 2015 estaban los Juegos Panamericanos en Toronto y no fuimos porque tenemos mala Federación. En 2019, vamos a participar en los Juegos Panamericamos. En 2023, estaremos en los Juegos Panamericanos de Santiago de Chile, en 2022, en los Juegos Centroamericanos de Panamá, Juegos Suramericanos de Asunción en Paraguay. En 2018 estuvimos en los Juegos Panamericanos en Bolivia y vamos a los juegos bolivarianos de la juventud”.

El objetivo de la pelota vasca, según el presidente, “es el de ir al primer cuadrante del deporte, como el atletismo”, al que lo comparó al señalar que las modalidades de la pelota equivalen a las modalidades de atletismo.

Por último, en cuanto a la expansión, Cazaubon admitió que “desde 1952 no ha habido un país europeo que se haya unido a la pelota”, además de apuntar que “el resto de equipos olímpicos han evolucionado”.

De cara al futuro, el crecimiento de la pelota tiene que ir, como concluyó Cazaubon, “lento. La pelota tiene que seguir creciendo, seguir consolidando la pelota. Aquí en Navarra, los jóvenes tienen referentes como Ezkurdia, Bengoetxea, Martínez de Irujo... Tiene que ser una maratón, no una carrera de 100 metros, porque este es un deporte que hay que reconstruir, empezando por dejar de mentir”.