Pamplona - Miguel Pozueta dimitió como presidente de la FNPV el pasado 13 de agosto. Su nombramiento como director del Instituto Navarro de Deporte y Juventud (INDJ) le obligó a la renuncia por incompatibilidad de cargos. Un día después, Ramón Martínez, pamplonés de 74 años y vicepresidente de la FNPV desde hace casi dos décadas, le relevó. Ayer fue ratificado en el puesto por la asamblea hasta los próximos comicios, que se celebrarán en los primeros meses del próximo año y a los que dice que no comparecerá, aunque confía en que haya un relevo continuista.

Para empezar, ¿quién es Ramón Martínez?

-Nací en la calle Tejería, entre los dos frontones más importantes de Pamplona, el Euskal Jai y el Labrit, y mi infancia y juventud discurrieron entre ambos. He hecho pinitos en otros deportes, como el balonmano y el baloncesto, pero siempre sin dejar de lado la pala, ni la pelota en general.

Así que su vinculación con la pelota viene de muy lejos.

-Eso es. Además, después nos mudamos a Noáin y mi hijo, con 6 años, nos dijo que se había apuntado en el colegio a cesta punta. En ese momento era la modalidad que menos había visto y que nunca había practicado. Y me enganché. En aquella época (se refiere a finales de los años 80 y principios de los 90) ya estaba en el Patronato de Deportes de Noáin, porque mi hija también jugaba a baloncesto y hacía patinaje artístico, pero me metieron en la junta del club de pelota. Y un día, casi sin darme cuenta, era el presidente. Estuve ocho años en el cargo y fue un tiempo precioso. La escuela de Noáin Jai Alai me ha dado muchas satisfacciones. Estábamos poca gente en la junta y estábamos encantados de llevar a los críos a jugar a Andoain, Gernika, Cabanillas...

Habla de varios frontones. ¿Y el Bidezarra de Noáin?

-Cuando yo estaba en el club, no era un frontón reglamentario para jugar a cesta punta. Ya antes de que Ion Oiartzun (gerente de la FNPV) fuera alcalde de Noáin se habló de la opción de hacer un frontón nuevo o de una ampliación, pero al final el arquitecto municipal diseñó un proyecto para remodelarlo y todo el mundo apoyó la iniciativa. Fue una satisfacción, aunque, para mí, el verdadero logro es mantener los clubes y creo que en este momento hay una cantera magnífica. Hay muchos críos jugando a cesto, he visto muchos partidos y los padres lo apoyan. Es algo precioso.

Hable ahora de su vinculación con la FNPV, de la que es vicepresidente desde hace casi 20 años. ¿Cuándo surge?

-Hace mucho tiempo que conozco a toda la gente relacionada con la FNPV y, a partir de estar en la junta del club de Noáin, entré en la asamblea. Fue una etapa de transición porque los que estaban en la FNPV llevaban muchos años, fueron dejándolo y la Federación iba languideciendo. En una reunión de clubes me ofrecieron presentarme a presidente, pero no quise, y después me propusieron que buscara una persona. Fue entonces cuando hablé con Miguel Pozueta (esta historia se remonta al año 2001 aproximadamente), que estaba en la Federación de Béisbol. Él quería quedarse más en casa y no estar siempre fuera, y me dijo que tenía que estar con él en la junta. A eso ya no pude negarme. Y hasta ahora.

Nunca ha querido ser presidente de la FNPV, pero ésta es la tercera ocasión en la que va a ocupar el cargo de forma interina, ¿no?

-En la anterior etapa de Miguel Pozueta como director del INDJ (en 2011), también presentó la dimisión e hicimos unas elecciones a las que se presentó Montxo Iriarte y, antes de que celebrasen, estuve de presidente en funciones, aunque durante un breve periodo de tiempo. Y después, cuando Montxo dimitió y volvió Miguel, también hubo elecciones y me tocó otra vez asumir la presidencia. En cambio, en esta ocasión el periodo va a ser más largo, porque hasta el año que viene no hay elecciones, pero no me voy a presentar. Creo que he cumplido el ciclo más que de sobra, aunque siempre tendré vinculación con la pelota porque es una cosa que se lleva en la sangre.

¿Qué tiene pensado hacer como presidente?

-Toca tirar del carro y sacar adelante todo lo que hemos preparado y hemos puesto en marcha. Y aparte de eso, preparar cosas que ya teníamos medio hilvanadas, pero que son importantes, como un torneo internacional de trinquete que será el Memorial Fermín Dufur. Ya hemos hablado de este tema con el Gobierno de Navarra y el Ayuntamiento de Pamplona y esperamos una participación importante. Queremos recuperar un torneo que hace años que no se ha hecho y queremos integrarlo en el calendario de la Federación. Y también seguiremos con el GRAVNI y con el resto de modalidades.

¿Algo más?

-Estamos invirtiendo tiempo, material y personal en la cantera y en seguir con la incorporación de la mujer a la pelota. La semana pasada hubo una concentración de críos y crías en Larrabide, que no es la primera vez que se organiza desde la Federación, y fue un éxito. Además, no sólo queremos hacer lo posible para que las mujeres se sigan incorporando a la pelota como deportistas, sino también como juezas y técnicas.

¿Va a ser una política continuista?

-Sí, porque lo que hace una gestora es gestionar, sacar adelante lo que estaba hilvanado, continuar con lo que ya estaba programado y organizar algunas competiciones nuevas, pero sin salirnos del camino y cumpliendo lo que marca la Ley del Deporte. Además, creo que la gente que está en la Federación, y me refiero a directivos, técnicos y al resto del personal, está muy preparada para seguir en esta línea.

¿Por qué ha aceptado tomar el relevo de Miguel Pozueta como presidente de la FNPV?

-Me hubiera gustado que siguiera, pero entiendo que tuviera una espina clavada de su anterior etapa en el INDJ porque en un año no le dio tiempo a mucho. Sin embargo, creo que va a estar siempre vinculado a la pelota y, si el INDJ ya nos echaba una mano antes, espero que esto siga al menos en la misma línea. Sabemos que no hay suficiente dinero para lo que nosotros necesitamos hacer y hay veces que lo tienes que buscar fuera, pero tenemos unos patrocinadores que son unos grandes aficionados a la pelota y gracias a ellos estamos sacando muchas cosas adelante.

Usted no se va a presentar a las elecciones del año que viene. ¿Y alguien de la actual junta?

-Sólo puedo decir que estamos hablando con personas, pero no es el momento de dar nombres porque acabamos de aterrizar. No obstante, creo que hay mimbres suficientes para que incluso de la misma junta salgan personas, pero en este momento no puedo decir nada. Lo único que puedo asegurar es que tenemos mucha fe en que se siga manteniendo la Federación en un nivel alto, algo que no es fácil.

“Me hubiera gustado que siguiera Miguel Pozueta, pero entiendo su decisión: tenía una espina clavada”

“El objetivo de la gestora es sacar adelante todo lo que hemos preparado y hemos puesto en marcha”

“Tenemos mucha fe en que el nivel de la Federación siga siendo alto y dentro de ella hay gente muy preparada”

Nombre completo. Ramón Alonso Martínez Asensio.

Edad. 74 años (14/2/1945).

Lugar de nacimiento. En la calle Tejería de Pamplona. “Antes se nacía en casa”, dice orgulloso.

Profesión. Trabaja como relaciones públicas de Grupo Teimper, enfocado en el sector de la química orgánica.

Estado civil. Casado (con Begoña), es padre de dos hijos (Iruña y Jon) y abuelo de cuatro nietas (Malen, Uxue, Eunate y Areta). “He tenido mucha suerte con mi familia”, destaca, incluyendo en la misma a su yerno (Patxi) y su nuera (María Mercedes).

Interinidad

Ramón Martínez ha sido presidente interino de la Federación Navarra de Pelota Vasca (FNPV) en tres ocasiones, aunque el periodo que afronta ahora va a ser el más largo de los tres.

Dos cambios más. Además de ratificar a Ramón Martínez como presidente de la junta gestora de la FNPV hasta las próximas elecciones, previstas para principios de 2020, la asamblea también confirmó ayer los nombramientos de Rufino Polido como vicepresidente primero y de Jesús María Porrón como vicepresidente.