pamplona - Las expectativas de CaixaBank para 2019 en Navarra son “optimistas”, según se ha puesto de manifiesto en un encuentro de la entidad con 130 clientes, en el que se ha analizado la situación económica actual y se ha abordado la evolución que pueden experimentar los mercados este año.

El Museo de la Universidad de Navarra acogió la jornada que se enmarca dentro del ciclo de conferencias sobre las perspectivas económicas de 2019 que CaixaBank llevará a cabo este año en toda España, según informa en un comunicado, en el que indica que esta iniciativa se dirige a clientes de la entidad pertenecientes al segmento de Banca Privada.

La jornada contó con la presencia de Alfonso Sánchez González, director de Banca Privada y Banca Premier de CaixaBank en Navarra y Santiago Rubio, director de Estrategia de Inversión de CaixaBank Banca Privada y Banca Premier, que ha impartido la conferencia Realidad y percepción y dio la visión de CaixaBank Banca Privada sobre el entorno económico actual. La presentación de este año subraya la discrepancia en 2018 entre la realidad, la evolución positiva de la economía, y la percepción, las caídas en los mercados financieros. Realidad y percepción divergen con frecuencia en este ciclo, según se apuntó en la jornada, en la que se ha añadido que “en el medio y largo plazo la percepción inevitablemente converge con la realidad, lo que hace que las expectativas para 2019 sean optimistas”.

negociaciones paradas La dirección de CaixaBank se mantiene firme con las condiciones propuestas en el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) para 2.157 empleados, entre las que destacan los salidas y movilizaciones forzosas, según sindicatos, así como una sensible reducción de la red.

Los representantes de los trabajadores aseguran que la “crispación” va subiendo cada vez más y se quejan de que el banco haya conminado a negociar las medidas propuestas con exigencias temporales. UGT asegura que CaixaBank ha amenazado con dar por agotado el periodo previo que estipula el convenio colectivo si no constata ningún avance respecto a la negociación.

“Así resulta muy fácil negociar, la dirección puede iniciar el reloj que marca el convenio cuando quieran y amenazar con la aplicación de las medidas si no se llega a un acuerdo”, denuncia el sindicato, que subraya que agotará “todas las vías necesarias” para que se retiren las medidas “traumáticas”. CCOO coincide en que para que la negociación se “despeje” es necesario que se eliminen las salidas y las movilizaciones geográficas forzosas, así como plantear unas condiciones económicas “aceptables”. - D.N.