Los jubilados de Zizur, Leitza, Lesaka e Irurtzun cobran las pensiones más elevadas de Navarra

Pamplona - Varias son las brechas que atraviesan al sistema de pensiones público. La más acuciante, una herida en toda regla, es la de su financiación, escasa cuando el desempleo supera el 10%, una economía de baja productividad no ayuda a elevar los salarios y la demografía sigue su rumbo implacable. Otra es la de género: las mujeres cobran casi un 40% menos que los hombres. Y una tercera es la geográfica: entre comunidades, pero también dentro de ellas. La pensión de jubilación en el municipio más rico de Navarra (Zizur) duplica a la que se percibe en algunas pequeñas localidades tanto del norte, como del sur y la Zona Media de Navarra.

Los datos, facilitados recientemente por el Gobierno central y correspondientes a 2018, detallan el pago de las pensiones por municipios y hablan no solo de la demografía de cada localidad, sino también de su historia y del tipo de actividad económica que las sostuvo durante años. Y sitúan a Zizur como el municipio con la pensión de jubilación media más elevada (1.545 euros), seguido de Leitza, Areso, Lesaka e Irurtzun. Todas ellas localidades con presente, pero sobre todo pasado industrial, que permitió a sus habitantes contar con una fuente de ingresos estables y elevar sus cotizaciones a la Seguridad Social, que en caso contrario habrían dependido casi en exclusiva de la agricultura y la ganadería. Fábricas todas ellas que vivieron su momento de mayor esplendor en un mercado menos global, pero que fueron negocios muy rentables y que pagaban salarios más elevados que la media en momentos (de los años 60 a mediados de los 70) de pleno empleo.

El caso más claro es el de Leitza, que tuvo en Sarrió Papel a su principal fuente de empleo durante décadas. Fundada el 1 de febrero de 1959, cumplió por tanto 60 años hace poco más de dos meses. A comienzos de los años 70, en vísperas de la crisis industrial, llegó a dar empleo a unas 1.500 personas. Casi todo el pueblo, que dobló su tamaño en uno años, trabajó allí. Pero también acudían trabajadores desde Areso, Larraun o Malerreka. Propiedad hoy de Lecta y con unos 450 empleados, la papelera sigue siendo la principal fábrica de la zona. Y los salarios que abonaba a sus trabajadores son los responsables de que la pensión media de los 568 jubilados leitzarras sea tan alta: 1.540 euros.

Una historia similar a la que se vivió por ejemplo en Irurtzun, donde el grupo Huarte instaló en 1956 una fábrica que terminó por cerrar durante la última crisis económica, pero que atraía trabajadores no solo de Irurtzun, sino incluso desde Pamplona y por supuesto de Sakana, cuya huella industrial se deja sentir hoy en las pensiones que se cobran en Alsasua, Etxarri, Olazti y Urdiain, por cita solo algunos ejemplos Todas ellas superan la media de Navarra, que roza los 1.290 euros. En Irurtzun, sus 273 jubilados cobran ya alrededor de 1.440 euros.

La misma historia se puede contar de Lesaka, otro de esos pueblos cuya historia va ligada a una fábrica. Las viejas Laminaciones, hoy propiedad del magnate indio Mittal, no dan empleo hoy a tanta gente como antaño. Pero siguen garantizando la prosperidad de un pueblo con 462 jubilados que cobran, de media, unos 1.490 euros mensuales en sus correspondientes 14 pagas.

Municipio

Cizur Menor1.585

Zizur Mayor1.545

Leitza1.538

Areso1.505

Lesaka1.488

Esteribar1.469

Barañáin1.453

Irurtzun1.440

Alsasua1.411

Municipio

Garde 791

Mués779

Eslava777

Arce 775

Isaba723

Zúñiga 708

Güesa686

Torralba686

Leache663

Javier572

Roncesvalles 566

Nazar 564

La media navarra, 1.283 euros

Pamplona, por encima. La pensión de jubilación media alcanza en Navarra los 1.283 euros y es la cuarta más elevada de todas las comunidades. En Navarra, 91.322 personas percibieron en mazo una pensión por jubilación, de las que algo más de una tercera parte (32.511) se encontraban en Pamplona. En la capital, la pensión media rondaba en 2018 los 1.391 euros, una cifra que no se encuentra entre las más elevadas de la comunidad, pero sí por encima de la media y muy superior a la que se paga en el segundo municipio de la comunidad: en Tudela, la pensión de jubilación media rondaba el año pasado los 1.202 euros. Las diferencia son incluso sensibles dentro de la propia comarca de Pamplona. Barañáin (1.453) supera ampliamente a Burlada (1.299) o a Berriozar (1.283). Aranguren (1.445), Egüés (1.454) figuran, junto a Cizur y Zizur como los municipios donde se abonan las pensiones medias más elevadas de la comarca de Pamplona. - D.N.