Pamplona. El próximo 2 de junio se abrirá el plazo para que personas autónomas soliciten las ayudas COVID-19 que concede el Gobierno Foral en el marco del programa Reactivar Navarra/Nafarroa Suspertu 2020-2023.

La dotación presupuestaria ampliable para esta iniciativa es de 35 millones de euros.

Las solicitudes deberán tramitarse a través de las entidades colaboradoras voluntarias, que podrán acreditarse a partir de este viernes 22 de mayo, ha informado en conferencia de prensa el consejero de Desarrollo Económico y Empresarial, Manu Ayerdi.

"Dicha adhesión constituye en sí misma una muestra de gran generosidad en el reto colectivo que tenemos como sociedad en la reactivación de la actividad económica una vez que la intensidad de la crisis sanitaria va remitiendo", ha destacado el consejero.

Las entidades colaboradoras solicitarán la ayuda en nombre del autónomo a través de una aplicación diseñada al efecto. Dispondrán además del correspondiente manual de uso y de un documento de preguntas frecuentes que se actualizará periódicamente.

Podrán beneficiarse de estas ayudas los trabajadores autónomos, los socios trabajadores de las cooperativas de trabajo asociado y los autónomos societarios que trabajen en sociedades mercantiles o en entidades sin personalidad jurídica.

El primer abono de ayudas se realizará el 24 de junio. A partir de ese momento, se realizarán los pagos de forma semanal.

Las personas autónomas podrán acceder a dos tipos de ayuda, una de ellas de 2.200 euros a quienes les haya sido reconocida la prestación extraordinaria regulada en el artículo 17 del Real-Decreto Ley 8/2020, de 17 de mayo, de medidas urgentes extraordinarias para hacer frente a impacto económico y social del coronavirus.

Además, deberán comprometerse a permanecer de alta en el régimen correspondiente de la Seguridad Social y en el IAE en Navarra, durante doce meses a partir del día siguiente a la finalización de la prestación extraordinaria.

También tienen una ayuda de 700 euros, que podrá ascender a 800 euros en función de la suma de los rendimientos netos de todos los miembros de la unidad familiar de la persona solicitante.

Está dirigida a quienes no hayan obtenido la prestación extraordinaria, pero hayan visto reducida su facturación en el mes natural anterior a la solicitud en, al menos, un 30 % en relación al semestre anterior.

Además, no tendrán que haber cesado en su actividad y permanecer de alta en el régimen correspondiente de la Seguridad Social o en una mutualidad de previsión social, así como en el IAE de Navarra, durante el periodo comprendido entre la fecha de la declaración del estado de alarma y la de solicitud de la ayuda.