- Miasa (Mecanizados Industria Auxiliar) solicitó el 1 de octubre ante el Juzgado de lo Mercantil de Pamplona un concurso voluntario de acreedores "para acometer una reestructuración de la deuda y del negocio y mantener la actividad" en la planta situada en el polígono de Landaben. Sin embargo, el comité, compuesto por cuatro delegados de CCOO, dos de LAB y uno de ELA, no tuvieron conocimiento de este paso hasta ayer por la mañana cuando la dirección reunió a la parte social para informar de este asunto.

Ya antes de conocer la tramitación del concurso de acreedores -antigua suspensión de pagos-, los sindicatos habían registrado una huelga indefinida desde las 22.00 horas del próximo lunes 12 de octubre por los recortes salariales de aproximadamente el 35% y por la amenaza de 30 despidos. El comité confesó que no esperaba que la empresa acudiera al concurso.

Miasa, especializada en la fundición y mecanizado de piezas para el sector de la automoción, justifica la necesidad de esta medida en la repercusión de la crisis económica provocada por el coronavirus en su negocio. En una nota, la dirección remarca que ha adoptado esta decisión "por responsabilidad para preservar el valor de la compañía, y para situarla en un escenario que le posibilite la reestructuración y que garantice la viabilidad a largo plazo". El concurso voluntario de acreedores otorga a la empresa la capacidad de seguir gestionando este proceso sin la presencia de un administrador externo.

El concurso conllevará recortes de plantilla y de derechos laborales, que ya están padeciendo sus trabajadores y trabajadoras. Actualmente, suma unas cien personas asalariadas, 80 aproximadamente en la sección de taller y 20 en oficinas. El comité informó de que antes de presentar la suspensión de pagos, la empresa ya había manifestado su intención de despedir a 30 empleados y que aplicó una reducción "drástica" de sueldos del 35%. La parte social convocó esta huelga indefinida para exigir "el mantenimiento de los puestos de trabajo y para acordar un nuevo pacto colectivo" y hasta que no se renueve, que continúe vigente el rubricado para el periodo comprendido entre 2015 y 2017, que se prorrogó hasta este septiembre. La plantilla reiteró "la nula disposición de la dirección a sentarse a negociar seriamente otro pacto, ya que lleva muchos meses intentando que lo haga, y no responde". A las reivindicaciones en este paro se unirá el rechazo a la gestión por acabar en concurso de acreedores.

Miasa presentó un expediente de regulación de empleo de suspensión temporal por fuerza mayor durante la declaración del estado de alarma; y posteriormente aplicó otro ERTE que concluye el 16 de octubre. Actualmente la plantilla ya está trabajando -a tres turnos-, excepto 13 empleados que continúan regulados al 100% y otros tres operarios que lo están al 70%, concluyeron fuentes sindicales.

Martes 13 de octubre. Para las primeras horas de huelga indefinida, el comité ya ha solicitado concentraciones en la factoría de Landaben, entre las 7.00 y 14.00 horas; y entre las 16.00 y 19.00 horas, informaron fuentes sindicales. El comité insiste en que la empresa debe asegurar "el futuro de la planta , con garantía y calidad en el empleo y con salarios dignos".

Planta en Zaragoza. La parte social denunció que Miasa ha dejado de asignar nuevos proyectos de mecanizados a Pamplona y que los deriva a su factoría de Zaragoza. Los sindicatos censuran "esta política empresarial, porque va en contra de la fábrica navarra".