La apuesta de Volkswagen por Navarra tiene sus límites. Y esta impresión se ha terminado por confirmar en las últimas semanas: la multinacional alemana ha decidido finalmente subcontratar a Hyundai el montaje de las baterías para los modelos eléctricos que se ensamblarán en Landaben a partir de 2026. Según ha podido conocer este periódico, la firma coreana tiene previsto anunciar la nueva fábrica a lo largo de los próximos días.
La inversión rondará los 200 millones de euros, la ejecutará Hyundai a través de su división Mobis y cristalizará en una planta que se ubicará en la Ciudad del Transporte, donde esta previsto que trabajen inicialmente unas 200 personas. El volumen final de trabajadores dependerá de la carga de trabajo de la planta. O, dicho de otro modo, del número de coches eléctricos que Volkswagen fabrique en Landaben. El grupo ha asignado a Pamplona el montaje de un SUV eléctrico de la marca Volkswagen y de un SUV de marca Skoda. Estos dos modelos convivirán inicialmente con los coches de combustión.
De este modo, las celdas de las baterías llegarán hasta la Ciudad del Transporte procedentes de la gigafactoría que Volkswagen levantará en Sagunto. Se montarán en la Ciudad del Transporte y, allí, serán subidas a decenas de camiones que todos los días recorrerán apenas diez kilómetros en autopista para llegar hasta Landaben. Un extra de emisiones de CO2 para un proyecto que tiene como objetivo limitar las emisiones del transporte y también un sobrecoste de unos 40 millones de euros anuales para Volkswagen Navarra, que no ha conseguido finalmente el apoyo de la multinacional para montar las baterías dentro de las instalaciones de Landaben.
Esta era la opción preferida tanto por la dirección de VW Navarra como por el comité de empresa y el propio Gobierno de Navarra. Aseguraba el empleo en la fábrica ante posibles caídas en la producción; hacía crecer las instalaciones aún más, aprovechando el espacio que liberarán las vías del tren; garantizaba que los puestos de trabajo que se creasen estuvieran amparados por el convenio laboral de VW Navarra; y, además, era más barato, por lo que permitía a Landaben seguir compitiendo de igual a igual con otras fábricas. No es difícil adivinar cómo buscará Volkswagen compensar ahora este sobrecoste.
Los motivos de la decisión, por tanto, hay que buscarlos lejos de Landaben. Y fuentes de la fábrica han señalado que “todas las empresas ponen un límite a sus inversiones”. En un contexto de transformación, cuando VW busca destinar todos los recursos a renovarse tecnológicamente y seguir retribuyendo a sus accionistas, el grupo habría decidido sacrificar el crecimiento de Landaben y priorizar Martorell, que contará con su propia planta de montaje de baterías tras acometer una importante obra de acondicionamiento en los terrenos.
Competencia china
La llegada de Hyundai, que se ejecutará a través de su filial Mobis, tiene también alguna ventaja para Navarra. Supone atraer al territorio a un segundo operador del sector de automoción. Hyundai-Kia es uno de los cinco primeros productores del mundo: cuenta con fábricas en Polonia, en la República Checa y en Turquía, pero también con un centro de diseño en Alemania, desde donde ha refinado la estética de sus nuevos modelos. Desde 2025 o 2026 tendrá así actividad industrial en el sur de Europa.
También acerca a Navarra una parte de la cadena de valor del coche que bien podría haber quedado en Barcelona –el grupo contempló concentrar el montaje en Martorell, a pesar de las dificultades que supone transportar las baterías 400 kilómetros– y, finalmente, permite ocupar una instalación, como la de la Ciudad del Transporte, cuyo desarrollo no se ha completado.
Todo lo demás dependerá de muchos otros factores.“El número de trabajadores –explica un buen conocedor de la inversión– dependerá sobre todo de cuántos coches eléctricos es capaz de vender Volkswagen”, un asunto nada desdeñable habida cuenta de las dificultades con las que se está encontrando el grupo alemán frente a los competidores coreanos, estadounidenses y, especialmente, chinos.
Las cifras de ventas en China, donde uno de cada cuatro coches matriculados son de baterías, se quedan de momento muy lejos de los objetivos que se había fijado la firma de Wolfsburg. Y las marcas chinas, más baratas y con un elevadísimo desarrollo tecnológico, ya han comenzado su asalto al mercado europeo, que se intensificará en los próximos años.
Apuntes
2026 Fabricación de eléctricos. Volkswagen Navarra está planificando el lanzamiento de las primeras unidades de coches eléctricos para la primera mitad de 2026.
300 euros por coche de sobrecoste. La opción escogida por Volkswagen supone un sobrecoste relevante en la fabricación de los vehículos, que según diferentes fuentes podría alcanzar los 300 euros por coche.
400 empleos en Barcelona. La planta de baterías de Martorell ya ha sido confirmada.