El final de la campaña ha evidenciado las urgencias de la derecha por cargar contra Chivite. Aunque la candidata del PSN no ha sido el único foco de sus críticas: los pactos con EH Bildu y los rescoldos de la guerra civil entre UPN y PP han aflorado con más virulencia a 72 horas de las elecciones.

Así, Javier Esparza, candidato de UPN, volvió a repetir que su partido no quiere un pacto con el PSN, y acusó a Chivite de querer “permitir” que EH Bildu “siga siendo protagonista de cara a futuro”.

Para el candidato de UPN, van a ser los regionalistas los que ganen con claridad las elecciones. “Hemos visto a María Chivite y al PSN empeñados en decir que van a ganar las elecciones”, reflexionó Esparza, que entendió que “cada uno defienda su partido”. “Pero eso es una cosa y otra es pasarse de frenada”.

“Ellos saben de sobra que van a perder las elecciones, saben de sobra que UPN va a ganar las elecciones”, aseguró, tras añadir que a los socialistas “no les cree nadie” y “están haciendo el ridículo más absoluto”. “El Partido Socialista de Navarra no va a ganar las elecciones porque va a tener menos votos, porque va a tener menos apoyos, porque la gente está muy harta de lo que han hecho en estos cuatro años”, aseguró, antes de vaticinar que alrededor de un 25% o 30% de socialistas que en 2019 votaron al PSN ahora lo harán a él “porque no están de acuerdo con lo que está ocurriendo en esta tierra”.

Concretamente, manifestó que “a los mítines de UPN está viniendo gente que ha votado Partido Socialista toda la vida” y una vez finalizados los actos “algunos de ellos se acercan y me dicen me has convencido, voy a votar a UPN”.

Esparza añadió que “hay un deseo enorme de cambio de Gobierno”, reflexionó. “La gente está cansada de gobiernos multipartitos, de cuatripartitos, de pentapartitos, que lo único que hacen es repartirse cargos pero no solucionan los problemas de los navarros”. “Hay muchos navarros, hartos de este Gobierno, que quieren un cambio de Gobierno”, dijo, para a continuación destacar que “es visible también el enfado de multitud de colectivos” con el actual Ejecutivo.

Abonado a la polarización

Y no faltó el recurso a la polarización de toda la campaña, y que ha tenido en EH Bildu al polo opuesto. “Escuchar a Chivite en estos días hablar de la dignidad de la política después de que ella es presidenta gracias a estos votos y de que quiere seguir siendo presidenta gracias a los votos de una formación política como EH Bildu, deja a las claras la catadura moral en este caso de la señora Chivite y de la actual dirección del Partido Socialista en Navarra y en Madrid”. “Quien vote al Partido Socialista después de esto tiene claro que vota un acuerdo con EH Bildu, no hay ninguna otra posibilidad”.

Por su parte, el candidato del PP de Navarra, Javier García, dijo que es “imprescindible” acometer actuaciones urgentes en la Ribera y acusó a María Chivite y a Uxue Barkos de ser las responsables del retroceso de la comarca. “Han condenado a la Ribera al retroceso en materia sanitaria, educativa, de empleo y, sobre todo, de futuro”.