donostia. Anoeta se viste de gala para recibir al todopoderoso Manchester United. Cuando se sortearon los grupos muchos afirmaron que la noche más especial era la que se viviría en Old Trafford. Pero no es así: la más importante es cuando un club de la talla del inglés, el segundo más rico del planeta, se presenta en Donostia para enfrentarse a un equipo cuyo principal orgullo estriba en la formación de jugadores. Si en el templo inglés fueron 6.000 los que disfrutaron de la experiencia, en esta ocasión los ingleses se van encontrar con 30.000 almas realistas dispuestas a llevar a su equipo hasta su primera merecida alegría en esta Champions.

Pero esto no es ningún sueño. La Real cada vez se encuentra mucho mejor y le va tomando el pulso a una temporada que le está exigiendo un reto desconocido hasta ahora para su plantilla como es afrontar dos duelos cada semana. El equipo realista cuenta con argumentos suficientes como para plantar cara y competir contra cualquiera en su estadio. Que se lo pregunten a los gigantes de la Liga. El equipo txuri-urdin ha ido recuperando lesionados y la forma de alguna pieza a la que le estaba costando adaptarse al pulso de la campaña. Su nivel de confianza y autoestima por fin parece a la altura de su incuestionable talento y, aunque sea muy complicado, en el vestuario nadie ha bajado los brazos y todavía confían en una heroica clasificación. Para lograrla necesitan ganar los tres duelos que le quedan, dos en casa, ante United y Bayer, y en Donetsk.

Jagoba Arrasate tiene a su disposición a su repetido equipo de gala de esta campaña para enfrentarse a los diablos rojos. El problema es que la evolución del equipo ha puesto en la palestra a varios jugadores meritorios con ganas de entrar en la alineación, como José Ángel, Rubén Pardo o Chory Castro. El técnico tiene que elegir entre seguir jugando con Vela como referencia ofensiva o volver a su guion habitual, con un 9 específico, como Seferovic. En defensa podrían regresar Mikel González y De la Bella, que descansaron ante Osasuna. En el centro del campo son seguros Markel y Zurutuza, y todo apunta a que les acompañará Xabi Prieto. Y en la delantera, los intocables Griezmann y Vela buscan compañía para lograr el gol.

El United se presenta en Anoeta con el recuerdo de haberse sentido superior en su estadio (declararon que podían haber ganado por cinco o más goles, pese a no marcar ninguno) y dispuestos a sellar su clasificación con otro triunfo. El sábado se impusieron con relativa tranquilidad en Fulham y no se puede descartar que Moyes vaya a dar descanso a alguna de sus vacas sagradas. Su mejor goleador, Robbie Van Persie, que no jugó en el duelo de hace dos semanas, y el buen momento de Wayne Rooney, son sus principales amenazas para la Real.

Los ingleses arrastran una cuenta pendiente en Europa, donde no ganan a domicilio desde el pasado 7 de noviembre en Braga. No parece Anoeta un estadio propicio para romper con esa estadística. Aunque probablemente todavía no sepan el motivo. Lo descubrirán pronto...

el partido

de hoy

Jornada:

4 ª de Champions

Estadio:

Anoeta

20.45 h (C+)

Árbitro:

Nicola Rizzoli

(Italia)