El Athletic frena su mala racha en un partido que se le complicó
Victoria trabajada en San Mamés ante el Mallorca con remontada en el tramo final
El Athletic frenó su mala racha de seis partidos sin ganar, cuatro de ellos de Liga en los que solo sumó un punto, con una victoria en San Mamés ante el Mallorca (2-1) merecida y clara en el juego pero que se le complicó en el tramo final.
Cuando parecía asegurado el triunfo bilbaíno con un penalti transformado por Iñaki Williams en el minuto 9, un centro-chut afortunado de Samu Costa en el 77 equilibró el encuentro.
Pero fue capaz de rehacerse el equipo de Ernesto Valverdey el joven Alejandro Rego puso el 2-1 y restableció la justicia en el marcador en el 82 rematando raso en el área un centro de Jesús Areso.
Con estos tres puntos el Athletic suma 13 y se incorpora de nuevo, aunque provisionalmente, a los puestos europeos, mientras que al Mallorca esta nueva derrota le deja varado en la parte baja de la tabla y ahora ya colista con solo 5 puntos sumados en ocho jornadas.
De salida, como estaba claro, Ernesto Valverde aún no tiró Nico Williams, recién recuperado de la lesión que le tuvo de baja seis partidos, y optó por las rotaciones para asemejar en lo posible el once a su equipo de gala, a pesar de las bajas de Sancety Berenguer.
Jagoba Arrasate, en cambio, solo hizo un cambio y por la lesión del japonés Takuma Assano.
No notó tanta ausencia ilustre en ataque el Athletic porque desde el inicio fue a por el Mallorca, le arrolló y le metió en su área dirigido por Galarreta y lanzado por Rober Navarro, quien empieza a soltarse en el jugador técnico y ofensivo que es y a mostrar un repertorio estimable.
Como Guruzeta y Serrano también se sumaron al abordaje, la pelota no salió del medio campo mallorquín hasta que el Athletic marcó. Lo hizoIñaki Williams transformando un penalti sobre el propio capitán del Athletic de Valjent. Una clara patada que el árbitro no vio en el campo pero sobre la que no tuvo duda en el VAR al visionarla.
Solo habían pasado 9 minutos y aunque la acción punible fue en el 7, ya para entonces los locales habían merecido algún gol en cuatro ocasiones entre el 2 y el 4 en las que Vivián se encontró con Leo Román y Navarro e Iñaki Williams, este dos veces, con cierta impericia.
Abierto el marcador, el Athletic tuvo una segunda oleada pasado el primer cuarto de hora, dos ocasiones de Nico Serrano que malograron primero Leo Román y después Mojica, y otra en la que Iñaki Williams volvió a estar espeso.
Se equilibró el encuentro, incluso el Mallorca amagó con un disparo de Darder, aunque desde lejos y mordido. Y ya llegando al descanso Areso no fue capaz ni de rematar, porque el balón le fue a su pierna mala, la izquierda, otro gran centro de Navarro.
La segunda mitad, ya con Nico Williams casi desde el principio porque tuvo que sustituir a su hermano Iñaki, lesionado, mantuvo la dinámica de superioridad rojiblanca si bien con el choque más equilibrado.
No se producían apenas ocasiones y lo más relevante a reseñar fueron par de remates fallidos de Muriqi. Primero un disparo desviado desde la frontal y más tarde un cabezazo mal conectado a centro de Darder.
En medio de un enfado generalizado con Alejandro Quintero, el Athletic encadenaba llegadas pero no ocasiones claras. La mejor, una volea de Navarro buscando un compañero en el primer palo.
Cuando parecía tener todo controlado el equipo bilbaíno, al menos en su propio área, un centro que parecía inocuo de Samu Costa desde la izquierda se fue envenenando hasta entrar de manera sorprendente en la meta de un superado Simón. Si lo que encontró Costa fue lo que buscaba, un golazo; si lo que buscaba era un centro, un tanto afortunado.
Como afortunado fue el remate del joven Rego para el 2-1 del Athletic. Un remate tímido a centro de Areso que pasó por debajo del cuerpo de un defensa, pero en dirección a portería.
El final del partido se calentó con continuas idas y venidas de un área a otra que dieron paso a una tremenda pitada al final de partido al árbitro del encuentro.
El Mallorca vio el 2-2 en un remate de Mateo Joseph y un centro de Llabrés que despejó Vivián y el Athletic el 3-1 en una cabalgada en campo rival sin portero bajo palos de Nico Williams.