La navarra Beatriz Zudaire cerró ayer su participación en los Juegos Paralímpicos en baloncesto en silla de ruedas femenino, con un octavo puesto y un diploma paralímpico. El combinado español jugó su último partido contra Japón con un resultado final de 72-55 a favor de las niponas.

Zudaire fue la tercera máxima anotadora del equipo, con ocho puntos. El equipo nipón no dio opciones a las españolas ya que siempre estuvo por delante en el marcador y fue ahondando las diferencias con el paso de los minutos. El marcador cada cinco minutos fue: 10-4, 20-13, 32-19, 38-26 (descanso), 46-34, 50-44, 60-49 y 72-55.

Por otro lado, el tenista de mesa guipuzcoano Ander Cepas perdió su partido de semifinales ante el belga Laurens Devos por 3-0 y se adjudicó, en su debut, la medalla de bronce en los Juegos Paralímpicos de París en la clase SM.

Cepas, de veinte años, nació con hemiparesia lateral derecha, una enfermedad que reduce su movilidad.

Formado en el Equipo de Promesas Paralímpicas Verallia, entrena desde hace dos años en el Centro de Alto Rendimiento de Madrid con Rafael Taboada, con el que ha experimentado una notable progresión.

En su debut en unos Juegos Paralímpicos, Cepas se plantó en la semifinal tras ganar en octavos al japonés Iwabuchi Koyo y en cuartos al ucraniano Iván Mai.

En semifinales no pudo con el número uno, el belga Laurens Devos, su ídolo, que no le dio opción y le acabó ganando 3-0. El bronce de Ander Cepas mantiene al tenis de mesa español en el podio de los Juegos Paralímpicos desde Barcelona 92. España suma 39 medallas en estos Juegos.