Masud Barzani, el padrino de los kurdos en Irak

erbil (IRAK) - Masud Barzani, adalid de la causa kurda, renunció ayer a la presidencia del Kurdistán iraquí por las tensiones con Bagdad a raíz del referéndum de independencia del pasado 25 de septiembre.

Perteneciente al clan de los Barzani, que desde los años cuarenta domina la política y parte de economía de la región, Barzani ha servido al Kurdistán con las armas y desde los despachos. A sus 71 años, lleva doce en la Presidencia kurda, aunque desde 2013 el Parlamento kurdo ha prolongado su mandato.

Barzani ha elevado la causa kurda en los foros internacionales, ganándose a EE.UU. y a la Turquía de Erdogan, que le han dado la espalda desde el referéndum.

Desde 2014, el Kurdistán se ha beneficiado de la lucha contra Estado Islámico (EI), anexionándose territorios yihadistas, lo que Barzani ha usado dentro y fuera de Irak para reivindicar su papel en el país.

Barzani nació el 16 de agosto de 1946 en Mahabad, fecha y lugar en que su padre Mustafa fundó el Partido Democrático del Kurdistán (PDK). Mahabad era la capital de un estado kurdo establecido en el noroeste de Irán y que colapsó en 1947.

Ese año los Barzani emigraron a Rusia, desde donde regresaron a Irak para verse exiliados en el sur del país por el Gobierno central. Tras el fin de la monarquía en 1958, regresaron a su natal Barzan, cuando Masud tenía 12 años.

A los 16, Barzani pasó a combatir con los peshmergas a las tropas iraquíes y a la Unión Patriótica del Kurdistán (UPK), facción rival del PDK.

Además, su padre y su hermano Idrís estuvieron en las negociaciones con el Gobierno central, buscando mayor autonomía para el Kurdistán, que le fue reconocida en 1990.

En enero del 1979 intentaron matarlo en Viena, cuando regresaba a Irak desde EE.UU., donde estaba cuidando a su padre, que murió en marzo de ese año.

Barzani dejó las armas y pasó a dirigir el PDK, reemplazando a su progenitor, y desde entonces ha estado en el partido, del cual no se sabe su cargo tras la decisión de ayer. - Efe