colombo - El presidente de Sri Lanka, Maithripala Sirisena, prohibió ayer el uso de cualquier tipo de prenda que cubra el rostro, después de la serie de atentados cometidos el pasado 21 de abril, Domingo de Recurrección, -en los que fallecieron 290 personas y otras 500 resultaron heridas-, de los que se acusa a organizaciones islamistas locales. “El presidente ha prohibido todo tipo de coberturas faciales que dificultan la identificación, lo que representa una amenaza nacional y pública”, informó la Oficina del mandatario en una notificación “urgente” que entra en vigencia a partir de hoy.

De este modo, el rostro “deberá exponerse claramente”, añade el comunicado, que precisa que la norma se ha implementado en el marco del estado de emergencia que rige en el país desde los ataques cometidos por, al menos, nueve personas suicidas. Cerca de un 9,7% de los 22 millones de personas que viven en Sri Lanka son de religión musulmana, y solo una pequeña minoría de mujeres cubre totalmente su rostro con el burka o el niqab, el velo usado por las musulmanas. En la comunidad religiosa, el comunicado fue recibido con temor a que reavive las tensiones religiosas en el país, que hace 10 años salió de una guerra civil.

investigación Mientras, sigue la investigación por los atentados continúa abierta. En los últimos días, las fuerzas de seguridad han practicado una serie de redadas a varios vecindarios del país, con predominantes poblaciones musulmanas, tras la pista de los responsables de los ataques a tres hoteles de lujo y tres iglesias. La Policía confirmó que entre los casi 150 detenidos se encuentra la esposa y la hija de Mohamed Zahran, el presunto organizador de los ataques. Las familiares del hombre sobrevivieron a la explosión de un suicida que se inmoló durante una redada de las fuerzas de seguridad a una de las casas seguras de los terroristas. En la última semana, los musulmanes han expresado su temor a las represalias en contra de la comunidad tras los ataques, y el ministro de Asuntos Religiosos Musulmanes, Abdul Haleem Mohamed Hashim, pidió el pasado jueves a estos no acudir a las plegarias colectivas del viernes. - Efe