El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, advirtió este jueves de que el despliegue de tropas de Rusia en Bielorrusia, vecina a Ucrania, en los últimos días, es "el mayor" que Moscú lleva a cabo desde la Guerra Fría.

"Se esperan 30.000 tropas de combate, Spetsnaz -fuerzas especiales de operaciones-, cazas incluyendo Su-35, misiles Iskander con capacidad dual y sistemas de defensa aérea S-400", indicó Stoltenberg en una declaración a la prensa en el cuartel general de la Alianza, en la que alertó de que se trata de una "amplia gama de modernas capacidades militares".

UNIDAD DE LOS ALIADOS

El máximo responsable de la Alianza Atlántica destacó la unidad de los aliados tras mantener una conversación telefónica con el primer ministro de Hungría, Viktor Orbán, quien la víspera visitó en Moscú al presidente de Rusia, Vladímir Putin.

"Todos los aliados están de acuerdo en la importancia del diálogo y la fuerte disuasión y defensa", señaló Stoltenberg en un mensaje de Twitter en el que agregó que "es bueno hablar de nuevo" con Orbán sobre "la crisis creada por la acumulación militar de Rusia en y alrededor de Ucrania".

En plena tensión entre Rusia y la OTAN a propósito de Ucrania, Orbán visitó este martes Moscú para reforzar las relaciones bilaterales entre ambos países y mostró buena sintonía con Putin, de quien es su mayor valedor en la Unión Europea.

"Hungría es parte de la OTAN y la UE, y seguirá siéndolo, pero eso no excluye que en ciertos temas políticos coopere con Rusia", dijo tras casi cinco horas de reunión con Putin el nacionalista húngaro, quien dijo ver posibilidades de alcanzar "una solución que garantice la paz y la seguridad de Rusia, y sea aceptable también para la OTAN".

Antes de ese viaje, Stoltenberg también habló por teléfono con el primer ministro húngaro y destacó, de nuevo, la unidad entre los países de la Alianza.

"En tiempos de paz y crisis, estamos unidos en la OTAN", había dicho el político noruego.