Las fuerzas militares rusas y los rebeldes separatistas han aumentado en las últimas horas la presión sobre la ciudad de Mariupol, una localidad portuaria del sureste de Ucrania que, en caso de caer en manos de Rusia, le permitiría avanzar en la creación de una franja que conectaría el Donbás con la península de Crimea.

Las tropas rusas han logrado tomar de madrugada la estratégica ciudad de Jersón y avanza hacia Mikoláiv, que ya está siendo atacada, y Odesa, el principal puerto ucranio en el mar Negro. Asimismo, continúa el asedio a Mariupol y a Járkov, donde la resistencia ucraniana está siendo muy dura