hemos vuelto a saber que otro ayuntamiento, en este caso el de Burlada, opta por la gestión indirecta, o sea privada, de su escuela de 0 a 3 años, además de que es posible que inserten un modelo lingüístico trilingüe, "que combinará la enseñanza en castellano con el aprendizaje del inglés y el euskera".

Desde la Plataforma Ciclo Educativo de 0 a 3 años hemos reflexionado, nos hemos informado y, sobre todo, hemos comprobado, como profesionales o familias de niñas y niños de este tramo de edad, que una gestión privada conlleva inevitablemente importantes riesgos para la calidad educativa de la escuela infantil. Efectivamente, una empresa o equipo educativo de servicio indirecto puede emprender la tarea de la gestión con mucho interés, a veces educativo, a veces lucrativo. Pero las propias características de la contratación (para cuatro años) y los sueldos notoriamente inferiores a los de escuelas de gestión directa-pública provocan, casi siempre, una gran ida y venida de nuevas educadoras y plantillas "eternamente jóvenes". De esta forma, es casi imposible desarrollar un proyecto educativo rico, continuo y basado en la experiencia previa como escuela y en la formación continua conjunta.

Una grandísima pérdida para la calidad de las escuelas que no son gestionadas directamente por el ayuntamiento es el casi secretismo en el que se desarrolla su proyecto educativo. Si los padres y madres de una niña que acude a una escuela infantil de gestión privada solicitasen poder tener una copia del proyecto educativo de la escuela podrían encontrarse con pegas. No creo que se lo negasen, por ser un documento público, pero el centro lo entregaría con miedo, ya que "¿y si ese documento (que es el que nos está permitiendo trabajar en esta escuela durante estos años) llega a manos de alguien que pretenda presentarse al concurso público en la siguiente convocatoria?". De hecho, es posible que en muchas escuelas ni las propias educadoras de la escuela tengan copia del proyecto (que se supone que desarrollan cada día) por este mismo miedo. Evidentemente, la colaboración y trabajo en común entre escuelas infantiles quedan, por lo mismo, bastante dificultados. Es lo que ocurre cuando se privatiza algo que nunca debe ser objeto de competición y mercantilización.

Mediante gestión privada, si no se ha rescindido antes el contrato, pasados 4 años, vuelve a salir a concurso la gestión. El personal no cobra antigüedades (excepto que la empresa o el ayuntamiento en cuestión se animen a poner ese dinero directamente de su bolsillo)? Con condiciones precarias es mucho más difícil lograr que el equipo educativo se sienta implicado en un proyecto con vistas a medio-largo plazo; es decir, un proyecto maduro (reflexionado, consensuado, revisado, basado en la experiencia, con objetivos que dé tiempo a desarrollar y evaluar por parte del propio equipo que los planteó...).

Por otra parte, a veces se desarrolla un trabajo en común Ayuntamiento-Escuela adecuado. Otras veces, no. En estos casos, la fuerza que pueden tener los criterios pedagógicos y la defensa de los derechos de la infancia es muy pequeña sobre los criterios económicos, políticos y/o electoralistas. Si las propuestas o peticiones del equipo educativo resultan incómodas para el consistorio, el riesgo es que éste haga lo posible por rescindir el contrato con la empresa en la próxima convocatoria. Este miedo a incomodar al consistorio hace que, a menudo, propuestas educativas interesantes se aborten y desmotiven de cara a proyectos innovadores de los equipos educativos.

Somos conscientes de que es una gran carga para los ayuntamientos encargarse de la gestión directa de las escuelas infantiles. Creemos que es el Departamento de Educación quien debe gestionar directamente estas escuelas. Pero que sea un ahogo para las administraciones locales y se decida minimizarlo mediante gestión indirecta no se puede hacer a la ligera y negando que ese servicio público esté perdiendo calidad. Calidad que siempre tenemos que matizar para no caer en ambigüedades y que la entendemos según los criterios que en la Plataforma defendemos sobre espacios, ratios, personal necesario titulaciones, sueldos y condiciones laborales?(ver Informe Planteamiento, situación y perspectivas de la educación de 0 a 3 años en Navarra de la Plataforma de febrero de 2008).

Quienes en el pleno del ayuntamiento de Burlada del 25 de febrero hablaron a favor de la gestión indirecta de la nueva escuela infantil daban la sensación de estar queriendo esconder la pérdida de calidad que supone esa decisión. Hay pérdidas que no se visibilizan tan fácilmente como las económicas y electorales, pero que son mucho más profundas.

* Educadora infantil. Plataforma Ciclo Educativo 0-3 años de Navarra