Los hongos hacen amigos en Elgorriaga

elgorriaga - La Cofradía del Hongo y la Seta de Navarra, que tiene su sede en Elgorriaga, a orillas del río Ezkurra y en la huerta micológica de Malerreka, cuenta desde ayer con seis nuevos amigos que fueron investidos en su capítulo que cumple su vigésimoprimera edición. El deporte, el impulso al dinamismo en la jubilación, y la pluma o la tecla tecnológica se incorporaron a la entidad y prometieron “por su honor” reconocer y promover el conocimiento y el disfrute gastronómico del mágico producto de la Madre Naturaleza.

Los nuevos cofrades, cuya andadura vital y profesional fue explicada por el Cofrade Mayor, José Miguel Galarregui, son el remontista Julen San Miguel, de la localidad vecina de Doneztebe; la atleta Ana Casares; el escritor Eloy Moreno (autor de El bolígrafo de gel verde); la bloguera de gastronomía Helena Bonhome; Gregorio Giménez Romero, vicepresidente de la Unión democrática de Pensionistas de Cataluña; y el que suscribe. Todos acogieron su investidura con alegría y la mejor de las voluntades por ampliar el conocimiento y las virtudes de los hongos, un poco reacios en brotar este año y por falta de humedad en la comarca no será.

La humilde pero preciosa iglesia de San Pedro acogió la misa que ofició Juan Zabala, que se estrena en la parroquia, y cantó el coro Santa María la Real de voces graves de Pamplona, que regaló luego un concierto que culminó con El menú, del alemán Karl Zöllnergerman y adaptada y con letra del vizcaíno Miguel Arregui en 1927, un canto muy del agrado de gastrónomos y comilones.

Con posterioridad, el grupo de Joaldunak de Zubieta puso en las calles colorido y ruido de esquilas, para asombro y admiración de visitantes que desconocen esta espléndida muestra etnográfica y para animar a la luna a que colabore en el brote de hongos, que esta vez, aunque también los había autóctonos, hubo que traer de Ultzama donde han tenido más suerte.