elizondo - El Gobierno de Navarra y la Diputación Foral de Gipuzkoa desarrollarán de forma conjunta el proyecto europeo Life + Irekibai, que persigue la mejora del estado de conservación de los hábitats y especies fluviales de los ríos Bidasoa y Leitzaran, así como de sus afluentes. El programa se ejecutará hasta el año 2020 y tiene un presupuesto de 2.999.372 euros, de los que la Unión Europea (UE) financia 1.788.624 (el 60%) a través del programa Life +, y el restante 40% lo aportarán Navarra (617.621 euros) y la Comunidad Autónoma Vasca, que abonará 582.127 euros.

La iniciativa cuenta como socios a Navarra, a través de la sociedad pública Gestión Ambiental de Navarra SA (Ganasa), y la Comunidad Autónoma Vasca, a través de la Diputación Foral de Gipuzkoa, la Agencia Vasca del Agua Ura y la Fundación Hazi. Se presentó ayer en Andoain, en acto al que acudieron la consejera de Desarrollo rural, Medio Ambiente y Administración Local del Gobierno de Navarra, Isabel Elizalde; y la diputada de Promoción Económica, Medio Rural y Equilibrio Territorial de la Diputación de Gipuzkoa, Ainhoa Aizpuru, acompañadas por Francisco Alonso, director de Obras Hidráulicas de la Diputación de Gipuzkoa; Iñigo Ansola, director general de URA, y Mikel de Francisco, representante de la Fundación Hazi.

el programa En el marco del programa se va a proceder a eliminar o reducir obstáculos en los cursos fluviales, controlar especies invasoras, restaurar hábitats y realizar acciones de seguimiento de ecosistemas y especies. El proyecto se completa con acciones de sensibilización de la población. La consejera Isabel Elizalde destacó la importancia del trabajo conjunto entre los dos territorios: “Compartimos ríos y especies de gran valor, que no entienden de fronteras administrativas”, al tiempo que resaltó cómo la colaboración permitirá alcanzar objetivos “mucho más ambiciosos” que la acción individual.

obstáculos en el río Diversos factores históricos y geográficos han hecho que los ríos Bidasoa y Leitzaran acumulen gran cantidad de obstáculos que interrumpen su continuidad. Como resultado, los ecosistemas se han visto alterados y las especies más sensibles (mamíferos semiacuáticos como el visón o el desmán, y peces como el salmón) han visto reducida o fragmentada su zona de distribución. Esto, unido al aislamiento genético y otros efectos asociados, pone en peligro su continuidad y su capacidad para recuperarse o hacer frente a otras presiones.

Por ello, permeabilizar los obstáculos fluviales constituye la principal línea de actuación en la gestión de los espacios Natura 2000 cantábricos. De hecho, la Comunidad Autónoma Vasca y Navarra vienen trabajando desde hace años en este sentido, tanto en acciones individuales en cada territorio, igual que en proyectos de cooperación conjunta como Bidur, Guratrans y otros.

De hecho, la denominación del nuevo proyecto, Irekibai, quiere reflejar la idea de eliminación de obstáculos o problemas, para lo que juega con los términos ireki (abierto) e ibai (río), para indicar que se trata de “abrir” los ríos. Los dos ríos nacen en Navarra y desembocan en Gipuzkoa.