tafalla - La ausencia de las anunciadas precipitaciones de lluvia, el cese del viento de los días anteriores y la temperatura agradable de diez grados en esos momentos del día, permitieron que en la tarde del pasado viernes la procesión del Santo Entierro en Tafalla se desarrollase con total normalidad, con gran vistosidad y solemnidad y alta participación.

Esta manifestación religiosa contó con la participación de cerca de 500 personas distribuidas en diferentes grupos y 160 de ellas portando en andas una decena de pasos con imágenes, esculturas y escenas de la Pasión de Cristo, en uno de los actos más característicos y tradicionales de la Semana Santa tafallesa. La procesión del Santo Entierro partió a las ocho de la tarde desde la iglesia de Santa María y durante cerca de dos horas recorrió un largo itinerario por las calles Túbal, Escuela María, Avenida Estella, Recoletas, Severino Fernández, Escuelas Pías, Mayor, Cuatro Esquinas y Garcés de los Fayos, hasta regresar de nuevo por Túbal hasta el mismo templo.

El cortejo se iniciaba con la Cruz de las Insignias, seguida de un nutrido grupo del colegio de Escolapios interpretando el canto del Gloria Laus. A continuación, desfilaron una decena de pasos portados a hombros por mozorros ataviados con túnicas y capirotes. Entre todos ellos también intervinieron un numeroso grupo de cantores, con más de medio centenar de voces, de la Asociación de la Aurora, alegorías como Las Siete Palabras o la Verónica con el paño con el rostro de Jesús, un grupo de soldados romanos, otros tres grupos de tambores que con sus interpretaciones marcaban el paso de los portadores de los pasos y acompañantes entunicados con farolillos encendidos, especialmente junto al paso de La Dolorosa. Cerrando la procesión, tres sacerdotes de las parroquias ataviados con sus capas pluviales, cuatro ediles de la Corporación, Pablo Larrasoaña, Jose Miguel Ullate y Loren Albéniz (UPN) y Albina Prieto (PSN), y cerrando esta completa comitiva, la Banda La Tafallesa.

Satisfacción El presidente de la Hermandad de la Pasión, Juan Pedro Monreal, como principal coordinador de esta procesión, expresaba su satisfacción por el desarrollo de este evento y agradecía las aportaciones y colaboraciones de todas las personas que hacen posible su normal desarrollo. “En estos últimos años -indicó- hemos realizado la restauración de varias esculturas en diferentes pasos, con el trabajo de la pintora y restauradora tafallesa, Asun Requena, pero por falta de un mayor fondo económico, este año no hemos podido hacer nuevas reformas de envergadura, aunque todos los años sí que tenemos que acometer pequeños arreglos en los diferentes pasos con la colaboración de un grupo de carpinteros y electricistas”. Mención especial también dedicaba a un grupo de costureras, coordinadas por Raquel Baena, que se encargan de preparar el vestuario. “Este año hemos hecho una capa nueva para el jefe de los romanos a los que también hemos cambiado las plumas de los cascos, arreglos en muchas túnicas e indumentarias de los diferentes personajes y en varios de los faldones de los pasos”, apuntaba Raquel Baena, en unos trabajos altruistas que se merecen ser dignos de elogio y de reconocimiento público. - Carmelo Armendáriz