A los pies de las Malloas, Arribe acogió el domingo la segunda edición de Emakume Artzainen Eguna, un día para visibilizar y reconocer el papel de las mujeres de Araitz-Betelu en el pastoreo, que recogieron el testigo de sus iguales de Lekunberri-Larraun. Y es que las pastoras salieron a la plaza. “Queríamos juntar a estas mujeres que han mantenido vivo el oficio y los caseríos. Han cuidado de la familia, del pueblo, de los bosques, de ovejas, vacas, gallinas, cerdos… Es hora de reconocer esa labor, esos trabajos interminables que han quedado ocultos”, señaló Martín Juanena, la voz de Aralar Irratia y presentador del homenaje. 

El relevo se representó en la plantación de un rosal, “con sus espinas”, como señalaron, que el próximo año irá a otra zona de Mendialdea, probablemente a Leitza. En el homenaje no faltó un aurresku, ni tampoco bertsos e irrintzis para las pastoras. Asimismo, se realizó el corte de queso de temporada, a cargo de Mª Concepción Irigoyen, la veterana del grupo con 92 años. De animar la mañana se encargó el rebaño de Orritz-Iskidi.

Mª Concepción Irigoyen, de 92 años, fue la encargada del corte de queso de temporada. N.M.

“La imagen colectiva del pastoreo es un hombre, cuando la realidad es otra, la mujer ha sido el pilar principal, detrás y en silencio”, apuntó Gotzone Sestorain, de la asociación de productores Habelarte, que reivindicó el oficio, “las ovejas dan forma a los paisajes, enriquecen la tierra y son aliadas de la biodiversidad”, y sobre todo el papel de la mujer. “Es clave en la renovación del sector. El futuro no está garantizado. Para atraer a nuevas generaciones es necesario dignificar este trabajo”, incidió. Al respecto, señaló la importancia de que los consumidores “apuesten por comprar productos de calidad y pagar precios justos”. A la Administración pidió ayudas para la incorporación de nuevas generaciones y garantizar el acceso a la tierra así como nuevas fórmulas colectivas que superen los roles de género y en las que los cuidados estén en el centro.

El rebaño de Orritz-Iskidi animó la mañana de feria. N.M.

Las pastoras de Araitz-Betelu homenajeadas eran: Mª Esther Amondarain, de Arribe, María Saralegui, Atallu; Kontxi Lizeaga, de Atallu; Izaskun Ezkurdia, de Gaintza; Arantxa Puldain, de Intza; Mª Concepción Irigoyen, de Uztegi; las hermanas Mertxe y Maritxu Otermin, de Azkarate; Mª Ángeles Ezkurdia, de Atallu; Isabel Zabaleta, de Arribe; Maider Agirrebarrena, de Uztegi; Lurdes Alustiza, de Intza, Mª Karmen Goikoetxea, de Intza; Amaia Argiñarena, de Gaintza; Tere Garralda, de Uztegi; Mª Jesús Goikoetxea, de Uztegi; Martina Askaray y Gurutze Otamendi.Todas recibieron un obsequio de manos de la consejera de Desarrollo Rural y Medio Ambiente, Itziar Gómez, y el alcalde de Araitz, José Manuel Zubillaga.

Este reconocimiento surgió de la mano de un grupo de trabajo del Consorcio Turístico Plazaola. “Vimos que hay mucha mujeres en cada zona, algunas en activo y otras no, y queríamos hacer equipo y mostrar que es un oficio que tiene pasado y futuro. En este oficio la mujer es la gran olvidada. La riqueza de una sociedad son las personas”, apuntó Idoia Olaskoaga, pastora de Etxarri.

En el mercado itinerante de Mendialdea también se pudo ver trabajar a los artesanos. N.M.

Primer mercado itinerante de Mendialdea

La plaza de Arribe también acogió la primera cita de los mercados itinerantes de Mendialdea, una feria que se puso en marcha hace cuatro años para promover, visibilizar y vender productos de temporada de los caseríos y artesanía de la zona de Mendialdea. Así, se pudo adquirir sin intermediarios verduras, hortalizas y frutos de temporada, queso, miel, embutido, paté, pan, o huevos junto con artículos de madera, cerámica, metal o textil. Este año serán nueve mercados.