El grupo de voluntariado GATA (Grupo Animalista de Tafalla) creado en 2018 y que, actualmente cuenta con alrededor de 15 miembros, se encarga de llevar a cabo, en colaboración con el Ayuntamiento de Tafalla, el proyecto CES (Captura-Esterilización-Suelta) en las colonias de gatos callejeros de la localidad.

Según la ley estatal de control de las colonias felinas y de protección animal, es una obligación de las instituciones hacerse cargo de los animales ubicados en sus municipios. Desde GATA recalcan que “no hacen esto porque les encanten los gatos, sino por ayudar al Ayuntamiento a cumplir dicha normativa obligatoria, en pro de los animales y del vecindario”.

Para hacer frente a los gastos, que muchas veces parten del bolsillo de las mismas personas colaboradoras, han reunido una cesta gigante de productos locales que se sorteará el próximo 5 de enero. Habrá primer y segundo premio para los números que coincidan con las 3 últimas cifras del sorteo del Niño (Reyes) y los boletos pueden adquirirse por 3€ en La Despensica de Nieves, Múgica Informática y los bares Txiki y Pasadizo.

El premio, que cuenta con productos alimentarios, prendas de ropa, vales regalo para cenas, pintxo-potes o almuerzos en la hostelería local e incluso hospedajes. El gigantesco premio está visible en el escaparate del nº 33 de la Calle Mayor.

Muestra de la macro cesta de GATA Endika Iriso

Desde la asociación se muestran encantadas con la colaboración de todo el pueblo para que la cesta luzca como se merece, ya que más de un centenar de establecimientos han participado en la colecta. “Tiendas, bares, restaurantes, particulares… cada uno ha aportado lo que ha podido y sinceramente el resultado es espectacular, mucho mayor de lo que esperábamos”, admiten alegres las voluntarias.

Colaborando en la convivencia

El objetivo principal del proyecto CES es controlar la población y tamaño de las colonias felinas, asegurando a su vez el bienestar de los animales para que puedan convivir de forma adecuada con el vecindario. En 2022 se puso en marcha por una partida presupuestaria del Ayuntamiento y se esterilizaron aproximadamente 25 gatos, y este año se han esterilizado alrededor de 40.

Según informan desde la asociación, este año ha aumentado enormemente la actividad de GATA debido al empleo de las redes sociales, donde promueven recogidas solidarias, atienden informes de la ciudadanía y gestionan adopciones de gatos y perros.

“En lo que va de año nos ha tocado atender más de 30 casos de diversa índole, en los cuales estaban involucrados alrededor de 50 gatos y 1 perro”, nos cuentan. Estos casos incluyen abandonados (especialmente camadas que se dejan en colonias controladas), animales callejeros en mal estado que requieren atención veterinaria, atropellos, animales extraviados... “Ha habido casos complicados como los de gente desahuciada o que se ve obligada a abandonar su mascota al no llegarle para el alquiler”, aseguran. Más de 30 gatos han sido dados en adopción mientras que otros se han podido reubicar en su colonia de origen.

Sin embargo, recalcan que no son una protectora, sino un grupo de vecinas voluntarias que "hacemos todo lo que está en nuestra mano para que la convivencia con los animales callejeros sea controlada y favorable para todo Tafalla”.

“Hay gente que se piensa que el gato es el cubo de la basura, no se da cuenta de que hay que darle la comida adecuada”

Una ardua labor

El proyecto exige una dedicación constante, ya que en cuanto se frena las cosas se complican. “Queremos evitar que haya cantidades excesivas de gatos y que los animales estén sanos, pero es un trabajo muy costoso y que nos va a llevar tiempo”, informan las voluntarias. Armadas de paciencia atrapan a los gatos con unas jaulas-trampa especiales que hay que vigilar presencialmente durante horas hasta que caen. Posteriormente se trasladan al espacio cedido por el Ayuntamiento en el corral de Chera, donde esperan a ser castrados y marcados antes de volver a soltarlos en sus respectivas colonias. También se ocupan de llevar al veterinario los gatos enfermos o de poner en adopción los que no pueden volver a la calle.

“Nosotras no cobramos un duro y si no estaríamos no habría nadie para realizar este trabajo”, nos cuentan. “Tras las adopciones también hay mucho trabajo, llamadas de teléfono, visitas al veterinario, mantenimiento del animal. Muchas veces tenemos que pagar de nuestro bolsillo la comida de los animales que mantenemos en casa hasta finalizar el proceso de adopción o incluso los que están en las colonias".

“Hay quien les da comida indigesta y luego, cuando la expulsan, se quejan de las caquitas del gato, pero no es culpa de este sino de quien lo mal alimenta”, advierten desde GATA. Por último, recalcan que “los gatos ayudan a que no haya ratas o ratones y aunque se les alimente cazan igual”. 

Según informan desde GATA, en Tafalla hay muchas colonias, pero algunas de las principales son la del Ereta, la zona donde estaba la tienda de Olagüe, cerca del antiguo matadero o la calle Belena de Hornos.