“Estamos diseñando un programa para fomentar el empoderamiento individual y colectivo para ponerlo en marcha este otoño”

¿Cuáles son los principales retos y prioridades de cara a los próximos años para que Altsasu sea más igualitaria?

–Entre los principales retos está la consolidación de todo el trabajo hecho en el plan anterior, es decir, continuar velando por el desarrollo y el cumplimiento de la ordenanza de igualdad que aprobó el Ayuntamiento. Otra prioridad es seguir desarrollando el primer protocolo territorial de Sakana junto con el servicio de Igualdad de la Mancomunidad. Asimismo, queremos avanzar en algunos ámbitos de intervención que se han desarrollado menos, sobre todo empoderamiento y participación sociopolítica de las mujeres, que es el cuarto ámbito de intervención del plan. Para ello, estamos diseñando un programa específico para fomentar el empoderamiento tanto individual como colectivo para ponerlo en marcha en otoño.

A grandes rasgos, ¿en qué consiste el plan?

–Lo hemos organizado en cinco ámbitos. El primero es gobernanza local y transversabilidad de género. Se trata de la parte más administrativa e incluye la ordenanza de igualdad, seguir la formación al personal político y técnico para que sea continua además de seguir avanzando presupuestos con perspectiva de género y temas como cláusulas de igualdad en subvenciones o contrataciones. Se trata de introducir la perspectiva de género en el día a día del Ayuntamiento. 

El segundo es que Altsasu sea un municipio libre de violencias machistas. Para ello, hay que seguir desarrollando el protocolo territorial, la formación de las personas que trabajan en la atención a las mujeres que están en situación de violencia y continuar con las campañas de sensibilización a la ciudadanía.

El tercero es poner los cuidados y las vidas en el centro de las políticas públicas. Para ello nos marcamos el objetivo de realizar un diagnóstico de los servicios que estén en el campo de los cuidados así como la situación de las mujeres que trabajan en estos servicios que será la hoja de ruta en este ámbito. El cuarto, como ya he mencionado, es empoderamiento y participación sociopolítica de las mujeres y en el que queremos incidir.

Estos son los cuatro ámbitos de la mayoría de los planes de igualdad. Pero han añadido un quinto, municipio igualitario. 

–Si. El quinto venía recogido en el plan anterior y nos parecía que algunas cuestiones como seguir trabajando el programa de coeducación con los centros escolares se quedaban fuera. También algunas iniciativas que queremos hacer más dirigidas a la ciudadanía. Estamos diseñando una beca de investigación para visibilizar y reconocer el trabajo y la aportación de las mujeres en el municipio además de recoger su memoria. Será otro punto importante. 

La brecha salarial de Sakana es la más alta de Navarra.

–Es un dato preocupante. Tenemos que tener en cuenta el gran peso de la industria del metal que existe en Sakana, sin embargo, solo trabaja en este sector en torno al 17%. Es un reflejo de la sociedad patriarcal en la que vivimos. Tenemos que poner las cartas sobre la mesa y apostar por acciones ambiciosas que puedan atajar este problema y sobre todo impulsar cambios de valores. Pero es algo que debemos hacer conjuntamente con todos los agentes que puedan estar implicados en ese ámbito. Si no tiramos todas de ese carro nos queda un valle muy atractivo para todos pero poco atractivo para todas. 

En octubre del pasado año se puso en marcha un proceso participativo para contrastar la propuesta del plan elaborada por el Área de Igualdad. ¿Qué destacaría de ese proceso?

–El proceso ha sido muy bonito y enriquecedor. Partimos de la valoración del segundo plan. Destacaría la participación del personal técnico municipal y también externo, movimiento feminista, mujeres, ciudadanía en general y personal político para su contraste. Hemos estado casi 50 personas trabajando alrededor del plan y recogiendo las aportaciones y reflexiones de la ciudadanía. Como entidad pública, nuestro deber es responder a las necesidades del pueblo, y en ese sentido, poner en marcha este tipo de procesos suelen ser enriquecedores. Quiero agradecer en especial al grupo de mujeres migrantes, el movimiento feminista y a la ciudadanía que estuvo junto a nosotras participando. Han sido imprescindibles. 

Para Amaia Abucide Aylagas es su primera legislatura como concejala. N.M.

Su grupo, EH Bildu, renunció la pasada legislatura la presidencia de comisiones informativas. Ésta, también con mayoría absoluta de Geroa Bai, han cambiado su postura y han asumido e igualdad y euskera. ¿A qué se debe el cambio?

–Antes de las pasadas elecciones municipales, en EH Bildu Altsasu hicimos una amplia y participativa valoración de la legislatura anterior y constatamos que ámbitos muy importantes de la acción municipal como derechos, igualdad o servicios públicos no se habían impulsado desde el Ayuntamiento y que, si la gente nos daba la oportunidad, teníamos que intentar cambiar esta situación. Asimismo, teníamos claro la necesidad de renovarnos, reforzarnos y ampliar equipos, tal y como hemos hecho para poner todo nuestro esfuerzo en que el pueblo avance. Ha surgido un equipo muy diverso y con muchas ganas. Ha pasado casi un año y hacemos un balance muy positivo, y sobre todo, estamos contentas porque hemos podido incidir en los propósitos que teníamos como avanzar en temas de publificación, mejorar los servicios que se dan al pueblo o poner en marcha proyectos de carácter social.

¿Queda mucho camino a recorrer en el camino hacia la igualdad en Altsasu?

–El Ayuntamiento de Altsasu ha hecho un trabajo impresionante en el tema de igualdad. Es los ayuntamientos más punteros, sobre todo en transversalidad de género y gobernanza. Idoia hizo un trabajo admirable. Se ha trabajo mucho, sobre todo hacia dentro pero la parte que tiene que ver con la ciudadanía ha quedado más pendiente. Por otro lado, estamos en un estadio que el que varios temas de violencia están muy claros y asumidos por la ciudadanía pero hay otras subliminales que hay que identificar conjuntamente y trabajar el empoderamiento de las mujeres mismas. Es muy interesante hacer esa red entre las mujeres del pueblo.