burlada - Pamplona Distribución SA promueve en Erripagaña Burlada una modificación del plan sectorial que impulsó hace trece años el Gobierno foral con el fin de posibilitar la construcción de 454 nuevas viviendas, de las cuales el 70% serían de VPO (318), y un centro comercial de 4.000 metros cuadrados en primera línea de la urbanización, en la zona más próxima a la rotonda principal que enlaza Mendillorri y el nuevo sector residencial. La firma vinculada a E.Leclerc presentó a finales del año pasado ante el Ayuntamiento de Burlada una propuesta alternativa al proyecto original (zona especializada en ocio y comercio), acompañada de un proceso de participación ciudadana de carácter consultivo cuyo plazo finalizaba el pasado 31 de enero.

La empresa impulsa este cambio urbanístico del Plan Sectorial de Incidencia Supramunicipal que debe aprobar en última instancia el Gobierno de Navarra para actualizar los usos de esta parcela ante la construcción de nuevos centros comerciales en Pamplona y su Comarca en las últimas décadas. La exposición pública se pospone ahora ante los requerimiento del Gobierno foral para justificar la nueva propuesta.

Pamplona Distribución SA es propietaria de los terrenos (una superficie total de más de 60.000 m2) donde en su momento se proyectó la construcción de un gran hipermercado, restaurantes y cine. En su nuevo programa exponen que la superficie construida máxima sobre rasante establecida en el PSIS vigente se cifra en 85.000 m2 construidos, mientras que en la nueva la máxima sería de 72.402 m2, “es decir, con una reducción de 12.694 m2”. De los 72.402 m2 construidos máximos de la propuesta, 20.017 m2 construidos se destinarían a usos terciarios y el resto a usos residenciales. En concreto, la sala de ventas del supermercado contaría con 4.000 m2. El espacio comercial en su conjunto contempla 16.500 m2 que incluye una oferta ocio y restauración, una zona hotelera y de usos terciarios.

Por otro lado, la oferta residencial agrupa siete bloques de planta baja más nueve alturas elevadas entre las calles Avenida Erripagaña, calle Copenhague y Lisboa. Destacan además que la nueva red viaria “permite alojar un total de 323 plazas de aparcamiento de uso público en superficie”. Se prevé también una cesión al Ayuntamiento de Burlada de una parcela de reserva de equipamiento polivalente público de 3.907,96 m2 frente a la parcela destinada a dotación sanitaria. Se forma además un “gran espacio público o plaza central que constituiría el ámbito idóneo para el equipamiento, el encuentro y la cohesión social del conjunto de la población de Erripagaña”. Esta plaza-parque dispone de una superficie de unos 10.000 m2 de los que unos 4.500 m2 podrían quedar “tratados como zonas verdes públicas, en función de la alternativa que se elija”.

Desde el servicio de Territorio y Paisaje del departamento de Desarrollo Rural, Medio Ambiente y Administración Local del Gobierno de Navarra se remitió la semana pasada un informe tanto al Ayuntamiento de Burlada como a la promotora del plan en el que se requiere a la empresa información relativa al impacto económico en las haciendas públicas (en la revisión se debe incluir la pérdida de ingresos que supondrá para el Ayuntamiento de Burlada la disminución “tan importante” de superficie comercial y de servicios), y en qué medida la vigente Ley de Ruido condicionará la ordenación propuesta (debiendo “plantear alternativas que disminuyan sus efectos”). El Ejecutivo también solicita información sobre las consecuencias que tiene para el conjunto del plan la disminución de superficie comercial y de servicios. Señala también que se deberá proponer como alternativa a “participación pública” la posibilidad de mantener la propuesta vigente en el PSIS para el área AR-2, así como analizar las consecuencias que puede conllevar la propuesta en la “movilidad y/o en las redes de servicios existentes”. También su encaje en las previsiones comarcales (POT3) del área de centralidad y, en particular, “a la población de Erripagaña y de los sectores residenciales circundantes”.

El departamento agrega por otro lado que dada la incidencia de la modificación el nuevo proceso de participación debería de desarrollarse al menos durante 60 días a partir de la presentación de la documentación. El Consistorio de Burlada ya había propuesto al Gobierno foral y a la empresa promotora la ampliación del proceso de participación pública hasta el 28 de febrero dado que el proyecto requiere “un amplio y profundo estudio”, el ámbito afectado incluye a los cuatro términos municipales y el hecho de que el proceso participativo coincidió con las fechas navideñas.