- El cementerio municipal de San José cerró ayer lunes sus puertas a los visitantes, en cumplimiento de las directrices marcadas por el Gobierno de España al decretar el Estado de Alarma para afrontar la crisis provocada por el coronavirus Covid-19. La restricción de acceso al recinto se extenderá mientras se prolongue esta situación. No obstante, se seguirán realizando servicios funerarios programados tanto de incineraciones como de entierros. En estos casos, se permite la asistencia de allegados siempre y cuando no superen las 20 personas, no haya aglomeraciones y se mantenga una distancia de dos metros entre los participantes en los servicios funerarios.

En la actualidad, Pamplona cuenta con aseos en la Plaza de la Cruz, Bosquecillo, plaza de los Fueros, Paseo Sarasate y Antoniutti, además de cerca de una treintena de aseos autolimpiables repartidos por la ciudad. Estas decisiones de clausura y restricción de uso buscan reducir al máximo la propagación del coronavirus.

En este mismo sentido, el Ayuntamiento ha reforzado las labores de limpieza y desinfección en la ciudad, de forma que, a las labores habituales, se han añadido otras centradas prioritariamente en zonas sensibles. En concreto, se han organizado servicios de limpiezas con equipos de agua con desinfectante para actuar en los alrededores de los centros de salud de la ciudad y en los recorridos de acceso a los servicios de Urgencias de los centros hospitalarios. También en las inmediaciones de las residencias de ancianos. Las labores de desinfección se intensificarán en las paradas de los autobuses, en las cercanías de supermercados y tiendas de alimentación, y cerca de los contenedores de basura.