Los refuerzos policiales del sábado hicieron que los diferentes cuerpos se vieran en gran medida por distintas zonas de Estella-Lizarra. Así participaron un total de 158 agentes trabajando por las calles de la ciudad: 62 Guardia Civil, 73 de Policía Foral y 23 de Policía Municipal, que realizaron cuatro detenciones. En total, se realizaron 643 pruebas de alcoholemia sin que ninguna fuera positiva y sí hubo un narcotest positivo.

También se produjeron un total 26 denuncias de tráfico y otras tres por “portar armas prohibidas”. Entre las atenciones se produjeron dos por intoxicaciones etílicas y también hubo cinco heridos en distintos puntos de las barracas. Por otra parte, se atendieron siete traumatismos producidos en distintos puntos de la ciudad.