pamplona - La Casa del Libro de la calle Estafeta celebró ayer con todos los honores la colocación en su fachada del reloj que avisa a los paseantes de la proximidad de las siguientes fiestas de San Fermín en días, horas, minutos y segundos. Carmelo Butini Echarte, que regenta la tradicional librería junto a su hermano Fermín, adquirió el citado medidor del tiempo tras conocer que desaparecía del local de la esquina de la misma calle donde la firma Kukuxumuxu, inventor de la idea, lo dio a conocer a los pamploneses y al mundo. El librero decidió contactar con los gestores de la citada marca con la intención de colocar el reloj en su local, lo que finalmente ha podido hacer realidad.

Decenas de personas, entre ellas el alcalde Joseba Asiron y algunos concejales del Ayuntamiento, acudieron al sencillo acto que tuvo lugar en plena calle al mediodía. El magnífico tiempo de ayer en Pamplona y la hora del evento ayudaron a que tuviera colorido y emoción, la misma que manifestaba sin parar el impulsor de la idea.

Tras un aurresku, Carmelo Butini pronunció un breve discurso destacando el espíritu sanferminero y la importancia simbólica que ha acabado teniendo el reloj que desde ayer luce en la fachada de la Casa del Libro. 293 días, 23 horas y 52 minutos es lo que falta hasta el 6 de julio de 2019. Es lo que ponía ayer el reloj del librero. - D.N.

Desde 1943. La Casa del Libro está ubicada en la calle Estafeta junto a la Bajada de Javier. Permanece abierta desde 1943.

El mismo reloj. Kukuxumuxu entregó a la librería el mismo reloj que durante años estuvo instalado en el número 76 de la calle Estafeta, donde obtuvo relevancia internacional. De hecho, el lugar se fue convirtiendo en uno de los puntos obligatorios para todos aquellos turistas interesados en la fiesta.