pamplona - La aprobación del Presupuesto de Pamplona para 2019, que sobrepasa los 213 millones de euros, sigue sin estar garantizada a unas pocas horas de que se celebre el Pleno convocado para su tramitación. Las reticencias de Aranzadi a sumarse al acuerdo alcanzado entre EH Bildu, Geroa Bai e I-E, que incluye la exigencia que la agrupación electoral había planteado como condición indispensable para el acuerdo con respecto a la limitación de hoteles y apartamentos turísticos, mantienen la incógnita sobre el último proyecto presupuestario de la legislatura.

Las discretas conversaciones mantenidas desde la rueda de prensa de ayer por la mañana, en la que Armando Cuenca reclamó que además se declare al Casco Viejo zona saturada de alojamientos turísticos, no han servido para garantizar los 14 votos necesarios para sacar adelante el Presupuesto, tras la anunciada oposición UPN y PSN.

Las cuatro formaciones que hicieron posible en 2015 el cambio en Pamplona aún disponen de margen para el acuerdo. Tienen de plazo hasta las 16:30 horas, cuando está fijado el inicio de la sesión, lo que tampoco supone una situación excepcional en el cuatripartito a la hora de apurar las negociaciones. En septiembre del año pasado, con las heridas de la ruptura del cuatripartito todavía muy recientes, fueron capaces de alcanzar un consenso apenas media hora antes de que comenzara el pleno en el que se iban a presentar para su aprobación las inversiones financieramente sostenibles.

Entonces fueron 6 millones euros; ahora están en juego 213 millones, entre los que se incluyen partidas para culminar buena parte de los proyectos que se han puesto en marcha a lo largo de la legislatura y las inversiones para nuevas iniciativas.

fines sociales El Presupuesto de 2019 destina a las áreas municipales de carácter social (Acción Social, Desarrollo Comunitario, Cultura y Educación, Participación Igualdad y Ecología Urbana y Movilidad, Vivienda o Empleo y Comercio) el 64,4% del gasto. De cada 100 euros, 88,1 están dedicados a capítulos de personal, gastos corrientes y financiación de servicios públicos, mientras para inversiones se reservan 7,68 euros de cada 100 y el resto se destinará a gastos y amortizaciones financieras.

No parece, pese al órdago lanzado por Aranzadi este martes, que las diferencias para alcanzar un acuerdo resulten insalvables. De hecho, el compromiso que Edurne Eguino ha conseguido a arrancar a Geroa Bai para que retire, en el caso de que se aprueben los Presupuestos, su enmienda sobre hoteles y apartamentos turísticos (que en la práctica iba a permitir la instalación de un hostel en la calle Mercaderes) es mucho más de lo que esperaban al comienzo del proceso negociador. En esta situación, no resulta razonable pensar que elevar las exigencias negociaras a dos días del Pleno pueda dar resultados y con un acuerdo sobre la mesa entre EH Bildu, Geroa Bai e I-E, la perspectiva de oponerse a los Presupuestos de la mano de UPN y PSN dejaría a Aranzadi en una complicada situación ante el electorado que apostó por el cambio hace 4 años.

El desacuerdo podría derivar en un panorama no deseado por nadie, ya que el equipo de Gobierno debería prorrogar el Presupuesto de 2018 y es muy posible que el hostel acabara instalándose, pese a que el acuerdo entre EH Bildu, Geroa Bai e I-E para recuperar la modificación aprobada el año pasado por el cuatripartito no lo permitiría.