pamplona - Radares que no multan ni sacan fotos al que se pasa de la raya, como ocurre con la mayoría, con esas cajas con aspecto de no pasa nada y a las que todo el mundo esquiva. De hecho, ni se les ve la cara, porque necesariamente no tienen que funcionar con cámaras, sino con sensores del movimiento. Y sus posibilidades son infinitas, tanto que hasta la misma NASA les ha comprado uno, invento made in Navarra y a un precio más que accesible, 199 euros más IVA (contacto en www.anteral.com/es). “Desde noviembre hemos vendido más de 50 unidades de nuestro radar estándar, ya en 8 países” y con clientes tan importantes como el JPL, el Laboratorio de Propulsión a Reacción, de la agencia espacial estadounidense, o el MIT, el Instituto Tecnológico de Massachusetts.

Detrás del desarrollo de esta tecnología, la marca uRAD, proyecto creado por la empresa Anteral, que surgió en el seno de la UPNA como una spin-off en el año 2010. Doce jóvenes doctores e ingenieros de Telecomunicación e Industrial de la Universidad Pública conforman el grupo, que comenzó desarrollando antenas, y que ahora también fabrica radares con posibilidades infinitas.

Itziar Maestrojuán, ingeniera de Telecomunicaciones de 32 años, es una de las caras visibles de uRAD, el radar que ahora ha comprado el Ayuntamiento de Pamplona dentro del programa Smart Iruña Lab, de aplicaciones para ciudades inteligentes.

Maestrojuán explica que “nuestras dos líneas de negocio principales son el desarrollo de antenas” y componentes de RF (radiofrecuencia) para aplicaciones de espacio, Telecomunicaciones, seguridad y defensa, etc. (la línea más madura) y “el desarrollo de tecnología radar para aplicaciones innovadoras como Smart Cities”. Es de esta segunda línea, como añade Maestrojuán, “de dónde surge la marca uRAD, Universal RADar, el proyecto con el que estamos trabajando con el Ayuntamiento”, y que se pondrá en marcha en Pío XII en los próximos días.

“URAD se basa en el desarrollo de tecnología radar compacta, ligera, versátil y potente para el impulso de aplicaciones innovadoras”, detalla esta ingeniera y añade que “esta tecnología radar nos permite detectar presencia, así como medir distancia y velocidad”, y “gracias a ella queremos dar solución a algunos de los problemas a los que se enfrentan las Smart Cities, las ciudades del futuro”. En este caso es el tráfico, pero también podría ser el número de clientes que entran a una tienda, o que se paran delante de un escaparate, ya que al no funcionar con cámaras el dispositivo no molesta ni intimida. “Existen muchos más usos de nuestra tecnología en el sector industrial, educativo e incluso sanitario”. Un ejemplo que explica Maestrojuán, la posibilidad de “medir el ritmo respiratorio de una persona”, una opción interesante, por ejemplo, para el control remoto de bebés o enfermos mayores.

a finales de MES, EN PÍO XII Porque a finales de este mes el equipo de uRAD va a comenzar con el programa piloto en la nueva avenida de Pío XII. “Vamos a colocar 3 ó 4 radares en la calle y se van a tomar datos de forma continua y en tiempo real, que ayuden a conseguir una gestión inteligente y eficiente del tráfico en esta zona y que pueda extenderse a otras muchas áreas de la ciudad”, investigando no solo los coches, “sino también los peatones”. Así, sus creadores defienden que “la principal ventaja” de uRAD y de esta tecnología radar, es que “no es dañina para el ser humano” y “tampoco interfiere con la privacidad de las personas, como podrían hacerlo las cámaras de vídeo”.

El tráfico será su objetivo. En una primera fase, el proyecto de este equipo de ingenieros “propone la integración de pequeños sensores radar en la ciudad, con el fin de monitorizar de forma inteligente el tráfico de todo tipo de vehículos y personas”, pero, además, de forma adicional, se podría “conocer la velocidad” a la que circulan los diferentes agentes del tráfico (tales como bicicletas, autobuses, patinetes, personas, camiones...), permitiendo, además, un conteo de los distintos agentes que atraviesan una vía y la obtención de información en tiempo real y de todo tipo de estadísticas que puedan ser utilizadas para mejorar la movilidad urbana.

EL TRÁFICO EN LA CIUDAD Los creadores de este radar han detectado que el problema que existe en las ciudades como Pamplona “es que el tráfico urbano es cada vez más denso, los carriles bici están cada vez más presentes y las zonas peatonales están sin control”, por lo que “muchas veces hay inclusión de vehículos en dichas áreas”, opina Maestrojuán. Por eso, si las autoridades buscan ciudades “más seguras”, estas tienen que ser “más inteligentes” y “es ahí donde nuestro radar puede aportar un gran valor gracias a su propio desarrollo y a un software de gestión y control”. Porque a través de su análisis puede conocerse qué tipo de vehículos circulan por la ciudad, a qué horas, en qué sentido, cuándo se utiliza el carril bici, por ejemplo, y a qué velocidades van bicis y patinetes, y si, por ejemplo, el uso de los semáforos es inteligente. Datos interesantísimos para mejorar el tráfico.

Nombres propios como Daniel Valcazar, Aitor Martínez, Rubén Caballero, Amagoia Tellechea, Mikel Goñi, Gonzalo Crespo, Borja Muerza, y los tres que han desarrollado la tecnología uRAD, Víctor Torres, Itziar Maestrojuán y Diego Gastón, demuestran que en Pamplona hay talento y mucho. El Ayuntamiento lo ha visto y ya está trabajando con ellos, pero también el CEIN. “Fuimos uno de los 8 finalistas del programa impulsor emprendedor de CEIN”, y esta semana “fuimos el segundo de los tres proyectos premiados por su evolución dentro del programa”.