pamplona - La Corporación municipal dio ayer carpetazo definitivo al proyecto diseñado en 2013 para la transformación del antiguo colegio de Maristas y que dibujaba una torre acristalada de hasta 20 alturas y 70 metros de altura pegada al actual edificio. Dicha propuesta donde tenían cabida 314 viviendas se aprobó in extremis en mayo de 2015 por UPN y PSN, y contó con informe negativo tanto de Príncipe de Viana (“por un planteamiento erróneo”) como por el Ministerio de Fomento (“afección de la torre en el espacio aéreo”), recordó ayer Joxe Abaurrea (EH Bildu). Ayer el Pleno del Ayuntamiento aprobó el trámite administrativo que da por finalizado el expediente de modificación estructurante del Plan Municipal solicitado por la congregación religiosa que ya ha presentado un nuevo plan para levantar 190 viviendas en régimen de cooperativa. El proyecto, que promueven los Hermanos Maristas a través del grupo Arrasate, plantea 134 viviendas protegidas. Dibuja dos nuevos edificios en el patio mirando a la avenida de Galicia y rehabilita la estructura actual que se recrece en dos plantas, además de crearse un civivox.

El responsable de Urbanismo destacó que a partir de ahora se abre una “nueva etapa” que resuelve de manera “más satisfactoria y respetuosa” para la ciudad el futuro de esta zona centro desechando un urbanismo “hortera, desmedido y especulativo” impulsado por UPN en alusión a la torre de 20 alturas proyectada en inicio. A diferencia del PSIS de Salesianos en esta operación el Ayuntamiento ha ejercido sus “competencias”.

Eduardo Vall del PSN acusó de electoralismo a Abaurrea y dijo que lo único que ha cambiado en el nuevo planteamiento es “la altura de la torre”.

También Juan José Echeverría de UPN aseguró que en cuatro años no se ha hecho “nada” porque este proyecto, al igual que el de Salesianos o el PSIS de Etxabakoitz, “usted se lo ha tragado y comido con patatas”. En el caso de Maristas “aburridos después de cuatro años han desistido de la propuesta y ya traerán una nueva”. “En realidad se ha cambiado, dijo, la torre por dos edificios y “un gran centro comercial” en el patio frente a la avenida de Galicia a costa de “la enorme plaza” proyectada en su día. Recordó además que la primera propuesta también recogía un 70% de vivienda protegida. Aseguró que para cuando se apruebe el plan los alumnos de Salesianos ya estarán estudiando en el nuevo centro de Sarriguren “y es lo que se consigue con un PSIS”.

Iñaki Cabasés, de Geroa Bai, dijo que esta operación demuestra que para trasladar un colegio no hacía falta un Plan Sectorial de Incidencia Supramunicipal (el Gobierno como promotor) como ocurrió con Salesianos, que “condicionó el urbanismo de la ciudad” con torres de 14 y hasta 17 alturas, ni eliminar la vivienda social para “rentabilizar” el plan. Aplaudió la incorporación de 150 viviendas protegidas en el centro de Pamplona en un barrio con problemas de envejecimiento, y aseguró que los Maristas han dado una “lección a todos también a ustedes (en alusión a UPN)”. Abaurrea rebatió a Echeverría que para el equipo de gobierno el interés general ha estado por encima del privado a diferencia de Salesianos donde “ustedes promovieron una operación especulativa para satisfacer el traslado del centro”. “Y Maristas hizo lo que tenía que hacer, un nuevo colegio mediante sus medios”, indicó.