pamplona - Los símbolos, algo que durante la pasada legislatura los regionalistas tantas veces echaron en cara al gobierno del cambio por considerarlo repleto de “obsesiones nacionalistas”, están marcando el inicio del mandato de Navarra Suma. Después del recuperar el nombre de la avenida del Ejército y de los continuos anuncios de recurrir la nueva ordenanza del euskera, ahora le ha tocado el turno a la monarquía.

Un retrato del rey Felipe VI de considerables dimensiones preside desde ayer el salón de plenos tras haber sido sustituido el anterior. El asunto generó en la pasada legislatura una intensa polémica que acabó con un recurso de UPN ante los tribunales por la ubicación de las banderas oficiales y el tamaño del cuadro del soberano, al ser considerado demasiado pequeño y poco digno para la institución borbónica.

“Somos un Ayuntamiento absolutamente privilegiado porque contamos con la judicatura velando por la buena decoración del ayuntamiento”, fue el sarcástico comentario que Joseba Asiron pronunció en octubre de 2017, tras conocer la resolución del Tribunal Superior de Justicia de Navarra que obligaba a situar el retrato del rey “en otro lugar preferente, pero sin que ello signifique que deban ser ubicados en el mismo lugar que anteriormente ocupaban, por ser competencia municipal el determinar dicho lugar”.

Finalmente el retrato de la imagen de Felipe de Borbón fue instalado en la pared principal de acceso al salón de Plenos, solo, sin ningún otro cuadro a su lado que pudiera rebajar su importancia, como en su día estableció el juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 1 de Pamplona.

En este mismo lugar ha sido colocado el nuevo, más voluminoso y visible desde el punto más lejano del pasillo de la zona noble. Pese al celo de algún funcionario municipal para evitar que el asunto trascendiera, los nuevos responsables de comunicación permitieron fotografiar el cuadro. Será en el Pleno del 3 de julio, el primero con Navarra Suma en la Alcaldía, cuando se conozca la ubicación definitiva de las banderas.