PAMPLONA - El Festival de las Murallas acoge este martes en su escenario de la Ciudadela las penúltimas actuaciones de esta edición, las de Kolektiv Lapso Cirk y Alos Quartet con Amaia Elizarán, dos personajes midiéndose contra la fuerza de la gravedad y un cuarteto de cuerda acompañado por danza contemporánea.

La doble sesión será la penúltima actuación del ciclo, ya que el miércoles 21 de agosto se clausurarán los espectáculos en estos escenarios al aire libre en un acto que correrá a cargo de los músicos de Bivouac.

Las funciones en el interior de la Ciudadela comenzaron el jueves 1 de agosto y, el miércoles que viene se completarán las 16 actuaciones previstas (en general presentadas en dobles sesiones).

Kolektiv Lapso Cirk presentará la obra 'OVVIO', una creación que se inició en 2016 en Turín (Italia) y se estrenó en 2018 en aquél país en un proyecto coproducido por diversas plataformas de circo en diferentes países de Europa.

Sus autores e intérpretes son David Díez Méndez (Valladolid, España) y Tomas Vaclavek (Eslovaquia) que exploran los límites extremos del equilibrio en oposición a la 'Ley de la Gravedad'. Ambos son dos artistas de circo especializados en el equilibrio y la manipulación de objetos y se han formado en la órbita de Circo-Vértigo.

En la escena dos personajes se enfrentan y se complementan sobre una arquitectura de planchas y barras de madera la buscando la relación entre los cuerpos y las construcciones generadas por sus maderas en un clímax de tensión y adrenalina ascendente en cada sucesiva construcción.

Tras la actuación circense, los músicos de Alos Quartet tomarán el relevo para preestrenar en la Ciudadela su nuevo disco, acompañados en la puesta en escena por la danza contemporánea de la bailarina Amaia Elizarán, creadora en 2015 de una compañía que se centra en investigar el lenguaje de la improvisación.

Alos Quartet es un cuarteto de cuerda que se acompaña de bajo y percusión y que se formó en 1999 con un repertorio de amplio espectro, desde los clásicos hasta la música contemporánea. Su versatilidad les ha permitido trabajar tanto con orquestas de gran prestigio como la JONDE, o la Joven Orquesta de Euskadi, como con solistas como Benito Lentxundi o formaciones como Oskorri.